Arcos de flores para decorar tu boda: acierta con la tendencia nupcial más instagrameable

Uno de los elementos más románticos y bonitos de la decoración de cualquier boda son, como no podía ser de otra forma, las flores. La elección de estas para adornar las mesas, las sillas de los invitados durante la ceremonia o el ramo de la novia son fundamentales y marcarán, en gran medida, el estilo general del enlace así como la paleta cromática por la que se han decantado los novios para determinados detalles; también, en lo que respecta al propio altar donde tiene lugar la magia.

Cada vez son más las parejas -por lo general de bodas civiles- que optan por decorar el espacio en el que pronunciarán el "sí, quiero" con flores a través de espectaculares arcos que, como si de un auténtico photocall se tratase, se convierten en el lugar perfecto para llevar a cabo algunas de las mejores fotografías no solo de los novios, sino también de los invitados, teniendo en cuenta lo mucho que enmarcan y centran la atención en aquellas personas que se sitúen debajo.

A todo color

Tipos de arcos de flores hay muchos y muy diferentes y suelen ser algo de lo que se encargan los wedding planner quienes, a menudo, son los que proponen incluir este elemento. Como todo lo que conforma una boda, tendrá que ir en línea con los gustos y preferencias de los protagonistas, así como reflejar su estilo y personalidad.

Una opción es apostar por la explosión de color, incluyendo flores de tonalidades llamativas que se mezclen con el verde de las hojas que les acompañan para rellenar el resto del arco. Así, podréis optar por un único color o mezclar varios tonos en función de pequeños detalles como los zapatos de la novia, la corbata del novio etc.

Minimal

Si bien es cierto que la mayoría de arcos de flores los realizan y colocan los organizadores de la boda o la propia finca, siempre existe la posibilidad de llevarlos a cabo con nuestras propias manos, especialmente, si estamos ante una boda eco-friendly o de carácter más distendido que no requiera tanta ornamentación y florituras.

Para bodas que tengan lugar en la playa, quedará especialmente bien un marco fabricado a partir de tres trozos de madera, adornado con pocas flores y/o hojas de árboles característicos de la zona como podría ser una palmera y tela blanca al más puro estilo ibicenco, cuyo encanto estará en el movimiento que tenga por el aire.

Monocromático

Como comentábamos al principio, los arcos de flores pueden estar formados de una auténtica vorágine de colores o, por el contrario, fundirse con el estilo minimal al construirse a partir de una única tonalidad e, incluso, el mismo tipo de flor; algo especialmente idóneo para bodas de aire vintage, más románticas o clásicas.

En este sentido, donde podemos incluir el toque innovador es en la forma que tenga el propio arco que, en lugar de ser cuadrado, podrá formar un círculo completo, tener silueta de pirámide e incluso, estar dividido en dos partes a modo de columnas sin ningún tipo de unión, pero sin renunciar a su función de marco improvisado.

Sobre la mesa

Más allá de la zona del altar, los arcos de flores son un tipo de adorno por el que también optan muchas parejas y wedding planners para la decoración de la mesa. En aquellos banquetes en los que los invitados se sientan alrededor de una larga mesa rectangular, estos arcos ejercerán de simbólicos divisores de los distintos grupos de amigos y/o familiares, así como tendrán una función esencial para poder colgar distintos elementos suspendidos como lámparas, velas y otra iluminación.

¿Lo mejor? Las mesas y los altares no son los únicos lugares en los que podemos situar nuestro arco de flores: el photocall, el candy bar, la entrada de la finca... Son muchas y muy diferentes las ubicaciones idóneas para este tipo de adorno y serán un detalle decorativo que no pasará desapercibido para nadie que pase por delante.