Todas las tendencias en vestidos de novia desmontables: capas, chalecos, dos piezas y más

Meghan Markle, Marta Lozano o Hailey Bieber, son algunas de las celebridades que protagonizaron un cambio de look en sus bodas. Tenían guardado en la manga uno o dos atuendos nupciales más para así, y en el momento preciso, dejar atrás el primer vestido y estrenar un segundo. De ellas, sus elecciones y cómo nos pueden servir de fuente de inspiración, te hemos hablado en Vanitatis, para demostrarte que se trata de un ejercicio de moda asentado entre las famosas y también como tendencia en alza que se expande en el sector.

Si eres de esas novias que siempre ha soñado con llevar varios trajes, uno para la ceremonia y otro para el banquete y la fiesta, los vestidos de novia desmontables son una opción de look a tener en cuenta. Dos looks nupciales en uno, esta es la máxima que rige los diseños convertibles que cada vez gozan de mayor presencia en las bodas que se están celebrando en 2023.

Una corriente que, en principio, surgió hace un par de temporadas con el objetivo de que la protagonista de la boda estuviera más cómoda en la segunda parte del evento cuando tiene lugar la fiesta y es necesario aligerar peso para disfrutar de una completa y total libertad de movimientos.

Con el paso del tiempo y esa idea de cambio de look pululando en el ambiente como tendencia, ha terminado por consolidarse como la opción escogida por esas mujeres que desean presumir de nueva imagen en un momento determinado de la celebración.

La cosa, más sencilla y práctica, no puede ser. Un mismo y único outfit de novia que, después de algunas modificaciones, piezas que se transforman, se ponen o directamente, desaparecen, es un nuevo look. Todo sin tener que despojarte por completo del vestido base principal y descubriendo así una de las grandes sorpresa de la boda.

Puede ser un abrigo joya sobre un vestido minimalista, como el que llevó la influencer María Pombo para su boda con Pablo Castellano; un traje voluminoso con una sobrefalda de quita y pon, el diseño escogido recientemente por la modelo Vania Millán para dar el 'sí, quiero' a Julián Bayón, o la actriz Lily Collins, que ocultó su vestido bajo una capa de encaje a lo Caperucita. Opciones de trampantojos nupciales hay cientos.

La propuesta de The 2nd Skin Co es la siguiente. De nombre Nadia, se trata de un vestido palabra de honor de silueta columna y largo midi confeccionado en un tejido de crepé blanco decorado con una lazada oversize en el escote. Debajo, y aunque simula ser parte integrante del traje, se incluye una blusa de encaje transparente para y una vez transcurrida la ceremonia, separar y dejar el torso y la espalda completamente al descubierto.

Del atelier de la argentina Catalina Silveyra nos llega la segunda idea. Vestido lencero de inspiración noventera, a lo 'slip dress', y sobre él, una especie de capa con cola elaborada en un tejido rústico con hilos metalizados en la trama, cuello halter y costuras desflecadas. ¿El resultado? Un nuevo look con un único gesto: quitar la prenda de arriba.

Las novias que escogen el pantalón como atuendo nupcial también pueden acogerse a esta tendencia. Así lo hizo la influencer Patricia García de Paredes para su boda en 2018. De la firma Dánae Tobajas Couture, la andaluza acertó al apostar por un mono en crepé blanco con una sobrefalda brocada muy voluminosa que, antes de abrir el baile, desmontó para lucir únicamente el pantalón.

Tres eran las prendas que componían el look desarmable de la última protagonista: una blusa con las mangas farol, una falda larga fluida y un chaleco decorado con flecos, todo de Marcela Mansergas. Inspiración para novias diferentes que buscan ese 'algo más' para vestir en el día más señalado de sus vidas.