Recordamos cuando Jacquemus cumplió su sueño y llevó un vestido de novia en su boda

Simon Porte, director creativo de la firma Jacquemus, parece que no se cansa de hacer historia dentro de la industria de la moda. Si un año atrás las fotografías de su boda con el empresario Marco Maestri en la región francesa de Charleval no pararon de ocupar titulares en los principales medios de comunicación, la pareja aún tenía guardado una sorpresa bajo su manga que fue desvelada por su amiga la cantante Dua Lipa.

La artista original de Kosovo publicó en su cuenta de Instagram unas fotografías exclusivas de la fiesta celebrada tras el enlace en las que se resolvía uno de los principales misterios generados: ¿por qué Jacquemus no había lucido un vestido de novia tal y como prometió? Pues el diseñador francés no solo cumple sus palabras, sino también uno de sus sueños y se enfundó en un modelo nupcial largo horas después de la ceremonia civil.

Siguiendo uno de los lemas de su vida y su nación: ‘Liberté, egualité y fraternité’, el creativo posó con un diseño de corpiño ceñido con tirantes anchos y escote pico con una impresionante falda de volumen de tul superpuesta en la zona baja de la cintura. Además, lo complementó con un llamativo velo largo transparente y un ramo de claveles blanco a juego.

En aquel momento, el diseñador llevaba semanas avisando en sus redes sociales de que este era uno de sus grandes deseos. Primero lo hizo con una fotografía de pequeño en la que se le veía con el vestido de novia de su madre y, posteriormente, con un vídeo en el que Lila Grace Moss lucía un despampanante diseño de silueta sirena con efecto semimojado y cola kilométrica al que acompañaba la frase: "Probablemente será mi vestido de bodas en 16 días".

Por ello, fue toda una sorpresa que Jacquemus caminase hacia el altar con un traje negro clásico de líneas rectas con blazer de abotonadura central, aunque contaba con un toque muy especial: una ligera cola de tul blanca en el lateral. Un complemento que, como hemos podido comprobar, era tan solo una pista de lo que podríamos ver después.

Simon Porte se convertía con este hecho en el primer hombre de relevancia pública en reapropiarse de los vestidos de novia y romper las etiquetas del género, haciendo una oda a la moda ‘genderless’, al igual que lo consiguió con una de sus últimas campañas de publicidad con Bad Bunny de protagonista.

El francés siempre ha utilizado su firma como un mecanismo de activismo. Es más, el pasado mes de junio publicó un stories diciendo: “Soy Gay”, a lo que una seguidora contestó: "Solía llevar tu bolso. Ahora (y emoticonos de vómitos simbolizando asco)". Y este replicó: "Mi bolso no te quiere. Si tú supieras la cantidad de personas gais que trabajan en Jacquemus. No te queremos como potencial cliente homofóbico".

Por ello, la boda de ADN 100% Jacquemus acabó con todos los convencionalismos de un enlace tradicional a través del uso de la alta costura. No solo las invitadas se transformaron en novias con modelos de la firma, sino que el propio novio fue en contra de la lógica del cambio de vestido en pro de la comodidad y prescindió del traje para barrer la pista de baile con un diseño largo.