Los detalles del look nupcial de Miriam de Ungría: marca española y minimalismo

Ha sido la gran sorpresa del fin de semana. Miriam de Ungría ha contraído matrimonio con el príncipe Ghazi bin Mohammad, sobrino del rey Hussein, padre del actual rey Abdalá de Jordania.

El enlace ha sido muy inesperado por lo desconocida que era esta relación. La Casa Real de Jordania ha sido la encargada de dar a conocer al mundo la noticia y lo ha hecho distribuyendo una fotografía en la que se ve a los novios junto al rey Abdalá, que asistió a la ceremonia.

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Paloma Barrientos

Para esta ocasión tan especial, Miriam de Ungría, que a partir de ahora ya es la princesa Maryam Al Ghazi en la Corte Hachemita, ha escogido un vestido que encarna la elegancia sumada a la sencillez. El ‘menos es más’ se cumple en este look nupcial. Se trata de un vestido de la firma Cortana, un diseño llamado Valentina, de satén de seda, color blanco hueso, falda larga al bies y cuerpo con cuello barco y manga francesa con escote trasero en V.

El minimalismo del vestido ha sido respetado en el resto del look. Miriam ha optado por no lucir llamativas joyas e incluso se ha decantado por un peinado de lo más natural, con melena suelta, evitando cualquier tipo de elaborado recogido.

Rosa Esteva es la persona detrás de la firma Cortana. Nacida en Mallorca, Esteva estudió Bellas Artes y Diseño de Moda en Barcelona. Creó Cortana en 2001 y fue entonces cuando abrió su primera tienda en Palma.

Sus creaciones, elaboradas al detalle por manos artesanas, se caracterizan por su cuidada selección de tejidos naturales de la más alta calidad, su paleta de colores y sus estampados únicos.

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Esta es la segunda boda que protagoniza Miriam de Ungría, quien es viuda del príncipe Kardam, el primero de los cinco hijos del rey Simeón II y la reina Margarita y heredero del último rey de Bulgaria. Fue en 2008 cuando llegó la tragedia a la vida de Miriam. Su marido sufrió un terrible accidente automovilístico que mermó su salud cada vez más hasta que falleció en 2015.

Kardam y Miriam se casaron en 1996. Si comparamos el look nupcial que la gemóloga e historiadora escogió en aquella ocasión, podemos apreciar la enorme evolución estilística que ha desarrollado con el paso de los años. En 1996, Miriam acaparó todas las miradas en la Iglesia Ortodoxa de Madrid, luciendo un romántico vestido de escote barco, mangas de encaje y una sobretela que salía de la cintura a modo de voluminosa cola. De entre las joyas de los Sajonia-Coburgo-Gotha, se decantó por la tiara de diamantes y perlas de la reina Giovanna, de la que nacía el extenso velo sobre un peinado recogido hacia atrás. Sin duda, se trató de un estilo muy diferente al que ha escogido ahora para su segunda boda. De un look muy elaborado y clásico, Miriam ha pasado a la sencillez compaginada con la sofisticación.