Novias con perlas más allá de las joyas: del vestido al peinado pasando por los accesorios
De negarse a llevarlas a presumir de ellas en todo su esplendor. Las perlas son tendencia entre las novias y si sabes cómo lucirlas, pueden ser la clave de tu look nupcial
Si algo está empeñado en demostrar el universo nupcial en los últimos tiempos es que, ni en bodas, ni en los looks de las novias, hay nada escrito. Cada pareja celebra sus nupcias como quiere y desea, y apuntando al vestido de la novia, son sus gustos y preferencias, independientemente de los protocolos, los que mandan a la hora de componer el atuendo para el 'sí, quiero'. Cumplir con todas las tradiciones ya no es un requisito obligatorio. En este sentido, son muchas las supersticiones que las novias han derribado a favor de su look.
Como aquella antigua creencia que relaciona a las perlas con un mal augurio. Los romanos relacionaban este material con las lágrimas de los ángeles y consideraban que una novia que las llevara el día de su boda sería desgraciada, porque su matrimonio quedaría marcado por la maldición del llanto. De esta forma, era impensable lucirlas en día tan señalado. Eso antes, porque las novias de hoy, presumen de perlas en todo su esplendor. Incluso, más allá de las joyas, del vestido al peinado, pasando por los accesorios, aquí encontrarás las formas más 'fashion'. Una tendencia nupcial que aterriza en el sector este 2023.
Vestido
Los diseños cuajados de perlas de la firma Christie Nicole Bridal ya son virales. Fáciles de reconocer a simple vista, presentan dos señas de identidad inconfundibles: las mangas tipo poeta y el corte completamente recubierto de estas inconfundibles joyas de nácar. Todo en blanco, la base y el tono natural de las perlas, es la manera más extrema y al mismo tiempo, atrevida, de llevarlas como novia el día de tu enlace.
Si el primer vestido de novia con perlas es demasiado para ti, puede que la segunda opción que nos propone la diseñadora Teresa Helbig, sea más adecuada para tu estilo. La catalana integra las perlas, en tamaño XL, en el cuello del traje. Confeccionado con un tejido satinado de color champán, el material de máxima tendencia para esta temporada, se trata de un modelo de diseño camisero con manga larga, corte en la cintura y de ahí, una falda evasé con abertura lateral. Una imagen de novia rompedora que, además de las perlas, se completa con unas botas de charol.
Peinado
Decorar la cabellera con perlas es también un ademán recurrente. Al igual que en los vestidos, encontramos dos maneras de lucirlas. La versión recatada, en una diadema o cualquier otro accesorio para el pelo. A pesar de su discreta elegancia, las perlas exigen su parcela de protagonismo. En pocas palabras, si estás pensando en engalanar tu cabeza con ellas, que sea a lo grande, con una diadema voluminosa bordada con una buena representación de perlas en diferentes tamaños.
Con una lluvia de gemas perladas perfectamente colocadas decoró Lauren Page su melena el día de su boda. Recogido el pelo con una impoluta coleta alta, para aplicar esta técnica es necesario un trabajo previo. Se aplica un gel fijador y después, perla a perla, gema a gema, se pegan una a una cada pequeña joya. El resultado final es mágico.
Accesorios
Por último, ponemos el foco de atención en los complementos. Con un notable y evidente incremento de las nuevas novias que, además del ramo, las joyas o el velo, dicen sí a incluir un bolso en su look nupcial, las perlas son, sin duda, el detalle joya más repetido de boda en boda. Dos requisitos imprescindibles a tener en cuenta. Importa el tamaño, no la piedra, pero sí del bolso: siempre pequeño, a modo de clutch, y cuajado de perlas de arriba a abajo.
Ideales para encajar en atuendos minimalistas, los zapatos repletos de perlas, además de poner el broche de oro al estilismo de la novia, ponen el cierre a esta tendencia de moda. Impulsados por la diseñadora Jimmy Choo, además de dicha piedra, no faltan una cómoda plataforma y unos buenos taconazos.
Si algo está empeñado en demostrar el universo nupcial en los últimos tiempos es que, ni en bodas, ni en los looks de las novias, hay nada escrito. Cada pareja celebra sus nupcias como quiere y desea, y apuntando al vestido de la novia, son sus gustos y preferencias, independientemente de los protocolos, los que mandan a la hora de componer el atuendo para el 'sí, quiero'. Cumplir con todas las tradiciones ya no es un requisito obligatorio. En este sentido, son muchas las supersticiones que las novias han derribado a favor de su look.