Sophie et Voilà: "Cuando probamos a Tamara Falcó el vestido de novia, su cara refleja emoción y felicidad"

Quedan cuatro meses para la boda del año o, en palabras de Sofía Arribas y Saioa Goitia, las diseñadoras de Sophie et Voilà, "la boda del siglo". El 8 de julio, Tamara Falcó e Iñigo Onieva se convertirán en marido y mujer en un enlace que tendrá lugar en el palacio El Rincón. Una relación marcada por una pequeña pausa que terminará con el final feliz que tanto deseaban ambos protagonistas. "La novia está preciosa, está contenta, superanimada.... Está pletórica", confiesa Saioa Goitia, la parte ejecutiva y empresarial de la firma nupcial, cuando le preguntan por la marquesa de Griñón.

Sofía y Saioa están en Madrid, y eso es algo extraordinario. Con su centro de operaciones y atelier principal ubicado en Bilbao, son contadas las veces que el dúo se desplaza hasta la capital para atender las peticiones de sus clientas. Tamara Falcó es una de ellas. "No vamos a mentir. Hemos venido a Madrid especialmente para ella. Hoy hemos hecho una prueba del vestido. Nosotras tenemos a Tamara, que es una novia que tiene muchísima repercusión, pero este año tenemos como unas 120 novias más y, aprovechando el viaje, vamos a ver a otras", cuentan.

En un vídeo exclusivo que la agencia Europa Press ha publicado, Sofía y Saioa, pilladas a las puertas del hotel Rosewood Villa Magna en Madrid, cuentan cómo avanza el proceso de creación del vestido de novia de la chef. La primera vez que se vieron las caras fue en Bilbao y con el diseñador Juan Avellaneda como amigo de Tamara. En esta ocasión, son las mujeres de Sophie et Voilà quienes han viajado al encuentro con la marquesa.

A pesar de que, antes de Falcó, la firma ya era un referente en el sector nupcial, ahora en torno a ellas y a su trabajo se ha generado una atención insólita. Sofía Arribas argumenta que el interés es normal: "Todos nos sentimos un poco parte de esa boda porque hemos visto crecer a Tamara, es casi como de casa, ¿no? Entonces todos estamos implicados en la boda".

Ayer, Tamara Falcó se probó el vestido de novia y su reacción quedará para siempre en los recuerdos del tándem. "Está preciosa, está contenta, superanimada, no sé. Es que al final las novias que están camino al altar, al día más feliz de su vida..., así que está pletórica". Un estado de ánimo, que choca con el vivido y experimentado en el primer encuentro. "Al principio decía que estaba un poco estresada porque al final queda poco tiempo, es la cuenta atrás, pero le ha cambiado la cara desde que tomó la decisión de seguir adelante y dar el 'sí, quiero", comenta la periodista.

El traje, como la novia, va encaminado y el proceso de creación está bastante avanzado. "Esto es mucho trabajo, o sea, un vestido de novia no es una cosa fácil de hacer, al final intervienen muchos factores, hay muchas cosas alrededor que tienen que unirse al vestido, entonces coordinarse es complicado. Queda mucho trabajo, pero es verdad que lo más difícil ya está hecho. Nosotras lo que podemos decir es que cuando le ponemos el vestido, la cara que tiene es de emoción absoluta y de felicidad".

De cómo es el traje, ni una palabra. "No importa que sea Tamara Falcó, no importa que sea cualquier otra novia, es el secreto mejor guardado de cada novia y hasta ahí podemos leer". Intuimos que, tal y como explicó Sofía hace unas semanas para Vanitatis, el vestido irá en la línea de estilo arquitectónico que distingue a la firma nupcial: "El carácter minimalista y femenino es común a todas nuestras colecciones".

Como en aquella primera reunión en Bilbao, junto a su amigo Juan Avellaneda, Tamara Falcó, en la prueba de Madrid, no ha estado sola. "Sí, siempre viene acompañada. Al final, piensa que es un momento muy íntimo, muy personal, muy familiar y sí que ha venido acompañada. Pero tampoco te podemos contar mucho más, porque ahí nosotras nos dedicamos a hacer el vestido. Nuestras novias son nuestro secreto mejor guardado, con lo cual no podemos decirte más", explica la diseñadora de Sophie et Voilà.

A pesar de que la citada agencia apunta que Isabel Preysler, madre de la novia, ha sido testigo de la prueba de vestido que ha tenido lugar en Madrid, ni Sofía ni Saioa confirman su presencia. "Sabemos de buena tinta que a Isabel le gusta", nada más.

A la pregunta de si firmarán algún otro vestido para el armario nupcial de la marquesa de Griñón, ambas mantienen el secretismo. "Va a estar preciosa desde el principio hasta el final, es lo único que te puedo decir", señala Sofía Arribas. Sí que apunta que será ella, la gran estrella de la boda, a la única mujer que van a vestir para el 8 de julio: "Esta vez va a ser ella en exclusiva. Creemos que una firma que se representa tanto en vestir a la novia debe centrarse en la novia y no copar protagonismo con alguna otra invitada".

En las distancias cortas, Sofía y Saioa hablan de Tamara Falcó como una persona "encantadora, es muy educada, tal como la vemos y muy inteligente". Sin una fecha cerrada para la siguiente prueba, queda en el aire: "Tamara no tiene una agenda fácil, o sea, está bastante ocupada y nosotras también, porque ahora empezamos desfiles en Nueva York y en Barcelona, también tenemos otras novias, y tenemos que cuadrar las agendas".

Lo que sí que tienen claro las diseñadoras de la marca bilbaína es que, a días de la boda y como última cita, "siempre se hace un ajuste final, siempre. Tú piensa que una novia de los nervios, de la angustia, baja medio kilo y un vestido que estaba perfecto de repente hace una bolsita. Entonces siempre hay un ajuste final".