Las novias se suman a la tendencia de las flores 3D: del vestido al velo, cómo lucirlas

Es el curso natural que suelen seguir las corrientes de moda en el universo nupcial. Primero, arrasan en las colecciones comunes y corrientes, y después, trasladan su arrolladora presencia a los vestidos de novia.

Un claro y reciente ejemplo son las flores 3D. Impulsadas por firmas como Loewe, Bottega Veneta y Carolina Herrera, rosas, peonías o margaritas brotan en nuestros looks. Asociadas tradicionalmente a la estética romántica que, por otro lado, está ligada a los looks para dar el 'sí, quiero', el próximo curso las flores aumentan el tamaño y el volumen para adornar delanteros, espaldas, mangas y tirantes.

Pueden florecer en cualquier pieza del armario nupcial, de salpicar el vestido de la novia a protagonizar accesorios como el velo y los manguitos. Es, por tanto, una tendencia de moda que las firmas especializadas en trajes de novia han asumido por completo.

En Sophie et Voilà, la marca bilbaína liderada por Sofía Arribas como directora creativa y Saioa Goitia en el rol de CEO, nos proponen convertirlas en protagonistas sobre vestidos de líneas depuradas y patrón minimalista, la especialidad de las expertas en diseño nupcial arquitectónico y limpio.

Otras firmas prefieren rendirse a la versión más excesiva de la corriente. Este es el caso de la línea 'bridal' de Viktor and Rolf. La enseña danesa apuesta por tejidos como el tul y el plumeti en trajes con corsé, falda voluminosa a capas y cola. Rosetones en relieve decoran la cintura y el escote, y en el imaginario de la marca, inundan el velo de la novia.

Apuntando a los accesorios, los manguitos, otra pieza hit entre las novias, se adornan con esas flores esculpidas. Después del boom de los guantes de ópera en looks de alfombra roja y en atuendos nupciales, los brazos siguen cubiertos, pero esta vez con manguitos. Perfectos para completar los looks de novia, ganan protagonismo en los segundos estilismos que emplean para cambiar de atuendo en la fiesta.

En la práctica, las flores en 3D aportan el toque romántico y moderno a los vestidos de novia que nos esperan en 2024. Los diseñadores se inspiran en la naturaleza, tomando así los ramilletes más perseguidos por las mujeres para componer sus ramos como adornos para los trajes.

Las flores 3D son creaciones artesanales que añaden una dimensión extra a los diseños, una corriente que ha ganado popularidad esta temporada y que la seguiremos viendo en 2024.

Esta tendencia sirve también para las que buscan algo diferente que huya de los convencionalismos de un tradicional diseño nupcial. Exquisitas y delicadas, las flores tridimensionales han invadido las colecciones y los complementos nupciales para conseguir dar vida a un look deslumbrante y lleno de texturas que dejará a todos boquiabiertos.