Mercedes Morales, mujer de Míchel, y su elegante look de madrina para la boda de su hijo: un vestido de Lorenzo Caprile con drapeados y falda pareo

Álvaro González, empresario e hijo de Míchel, el exjugador del Real Madrid y leyenda del balón, y la influencer Carla Vico, ya son marido y mujer. Su boda, una de las más esperadas de la temporada, ha tenido lugar este viernes 27 de junio en Madrid. Tanto por el círculo de amistades de los novios como por el de sus progenitores, a las puertas de la iglesia Parroquial de Santa Bárbara. Ubicada en pleno barrio de las Salesas, se ha producido un desfile de rostros conocidos.

Por supuesto, los familiares más directos de la pareja, los padres de Álvaro, Míchel y Mercedes Morales, su hermano, Adrián González, y su mujer, la creadora de contenido Natalia Coll, y amigos como María Pombo y Pablo Castellano.

El novio ha llegado al templo enfundado en un chaqué creado a medida por Absolute Bespoke. De su brazo, la madrina de la boda, la mujer del entrenador del equipo Al-Qadisiyah, que ha deslumbrado con su look.

Al igual que hizo para la boda de su hijo mayor, acontecida hace diez años en la misma iglesia, Mercedes Morales ha confiado su outfit en Lorenzo Caprile. Si para aquel enlace celebrado en 2015, la mujer de Míchel optó por un ajustadísimo vestido rojo Caprile con mangas de pedrería, escote en V decorado con un broche vintage y silueta sirena rematada con cola, además de un original tocado de plumas, esta vez ha cambiado de tercio.

Así, Mercedes Morales, muy emocionada, ha acompañado al benjamín de la familia, el empresario y uno de los socios detrás de La Martinuca, con un estilismo elegante que la convierte en una de las madrinas mejor vestidas del año. Morales y el astro del balón, casados desde 1986, son uno de los matrimonios más sólidos del panorama social de nuestro país.

Confeccionado en un tejido de gasa muy fluido, perfecto para esta época del año, el vestido de Lorenzo Caprile ha llamado la atención por dos rasgos: su patrón con drapeados y falda pareo, y su color, un verde vibrante muy favorecedor.

Partiendo de un escote en pico abierto, el diseño de Mercedes Morales presentan un cuerpo ceñido con drapeados por el corte. Las mangas, largas y abullonadas, completan la imagen de superior del look. Un corte en la cintura con detalle de nudo lateral da paso a una falda pareo con abertura lateral. El efecto final de la falda es de una pieza con movimiento.

La madrina de la boda ha combinado su vestido de Caprile con un bolso de mano bordado con flecos en el mismo tono, unas sandalias con plataforma de color beige claro y una flor decorando el recogido bajo que ha lucido. Discreción en las joyas, la mujer de Míchel ha optado por unos pendientes largos. Un estilismo de madrina llamativo y elegante que le otorga un buen resultado a la madre del novio.