'Jorgeja' y cía juegan con la muerte para subir en audiencia

El colmo de los colmos. Telecinco y Sálvame han sobrepasado los límites de la telebasura sin vuelta atrás y parece que el carro de estiércol televisivo circula sin frenos.

El pasado martes, Lydia Lozano, recordada por muchos por haber protagonizado el mayor de los ridículos de la historia de la televisión a cuenta del "cuento" de que la hija desaparecida del cantante Albano estaba viva -tesis que defendió hasta la saciedad-, se hizo de nuevo presente en el esperpento. 

La periodista, que en su día fue humillada públicamente por Telecinco al ser obligada a pedir perdón en prime time al susodicho cantante, recibió una llamada en directo en la que supuestamente le confirmaban la muerte de un personaje muy querido en España.

Momento en el que, mediante una magistral interpretación digna de ser premiada, la otrora colaboradora de A tu lado procedió a abandonar el  plató con las manos a la cabeza y la cara desencajada. Aparentemente, algo terrible acababa de ocurrir, sensación que ratificó y aumentó el comportamiento alarmado de sus compañeros de plató, lógicamente compinchados. 

Era mentira. La llamada, como no podía ser de otra forma, resultó una farsa, pero Telecinco mantuvo a la audiencia expectante durante una larga pausa publicitaria para saber quién era el supuesto fallecido.

Al final, Jorge Javier Vázquez decidió ‘castigar’ a Lozano en una silla fabricada con ratas de peluche. Ver para creer. Pero tal fue ridículo que en la página web de Telecinco resulta imposible encontrar alguna noticia que haga referencia al circo del martes. Hasta en la propia cadena de Vasile son conscientes de que, después de utilizada, es mejor esconder determinado tipo de suciedad.  

Ayer miércoles la red elucubraba sobre quién sería el supuesto personaje fallecido. Algunos hablaban de la Duquesa de Alba o Carmen Sevilla mientras que otros afirmaban qué la Lozano había tomado como cierto el rumor de la muerte de la modelo Silvia Fominaya.