Eurovisión 2018: ¿Por qué es el 'puesto maldito' el de Alfred y Amaia?
La canción y la puesta en escena durante la final del Festival de Eurovisión suelen ser claves para obtener una buena posición, pero la suerte juega también un papel fundamental
La suerte no acompaña a nuestros representantes en Eurovisión. España actuará en la primera mitad de la gran final del certamen y además lo hará en segunda posición, lo que significa que Amaia y Alfred se subirán al escenario del Altice Arena a los pocos minutos de arrancar la gala. Esta mala posición repercutirá, sin duda, en la audiencia del propio festival, aunque seguramente logre mejorar los datos de años anteriores. La curva de Eurovisión es siempre ascendente, aunque hasta ahora el mayor pico de audiencia se ha registrado casi siempre durante la actuación española.
Actuar en segunda posición no es una buena noticia, al contrario. Se trata, de hecho, del 'puesto maldito',y es que en los más de sesenta años de historia del festival, ningún país ha logrado ganarlo partiendo de esta posición. España actuará tras Ucrania. Será Mélovin, con su canción 'Under the Ladder', el encargado de abrir la gran final del certamen que este año se celebra en Lisboa (Portugal).
Desde el año 2000, España ha actuado en esta segunda posición en dos únicas ocasiones: en 2007, con D'Nash; y en 2010, con Daniel Diges. La Boy Band quedó vigésima (de entre 24 países), mientras que el madrileño se tuvo que conformar con la decimoquinta posición (de entre 25 países).
La maldición
En los últimos 20 años, tan solo tres países han logrado estar entre los primeros 10 puestos, lo que significa que el resto han quedado más bien relegados a la cola. Incluso en doce ediciones los países que actuaron en la posición 2 se tuvieron que conformar finalmente con las últimas 5 posiciones. Todo un drama.
La segunda posición en otras ediciones
2017: Polonia (puesto 22, de 26 países)
2016: República Checa (22/26)
2015: Francia (25/27)
2014: Bielorrusia (16/26)
2013: Lituania (22/26)
2012: Hungría (24/26)
2011: Bosnia y Herzegovina (6/26)
2010: España (15/25)
2009: Israel (16/25)
2008: Reino Unido (23/25)
En los últimos diez años, solo Bosnia y Herzegovina logró, en 2010, colarse en el puesto nº6 gracias a 'Love in Rewind'. La canción logró 125 puntos frente a los 221 que consiguió el país ganador, Azerbaiyán, con la canción 'Running Scared'.
2007: España (20/24)
2006: Moldavia (20/24)
2005: Reino Unido (22/24)
2004: Austria (21/24)
2003: Austria (6/26)
2002: Reino Unido (3/24)
2001: Islandia (22/23)
2000: Países Bajos (13/24)
1999: Bélgica (13/23)
1998: Grecia (20/25)
Hace ahora 19 años, en 1999, España actuó en tercera posición y quedó condenada a la última posición (23/23). La cantante Lydia, con la canción 'No quiero escuchar', sumó tan solo 1 punto. Un año antes, en 1998, nuestro representante, Mikel Herzog, salió al escenario del National Indoor Arena (Birmingham - Reino Unido) en cuarta posición con un resultado algo más positivo: 16º, de entre 25 países.
Ramón ('Operación Triunfo 3'), la excepción
Los datos estadísticos son los que son. Ningún país en segunda posición ha logrado ganar el Festival de Eurovisión, sin embargo, actuar de los primeros no significa automáticamente quedar relegado a la cola. En 2004, por ejemplo, Ramón (segundo finalista de 'OT') representó a España y alcanzó el 10º puesto, a pesar de abrir el festival de aquel año. El triunfito actuó en primera posición y aún así su canción 'Para llenarme de ti' logró cautivar a gran parte de Europa. En total, sumó 87 puntos.
La suerte no acompaña a nuestros representantes en Eurovisión. España actuará en la primera mitad de la gran final del certamen y además lo hará en segunda posición, lo que significa que Amaia y Alfred se subirán al escenario del Altice Arena a los pocos minutos de arrancar la gala. Esta mala posición repercutirá, sin duda, en la audiencia del propio festival, aunque seguramente logre mejorar los datos de años anteriores. La curva de Eurovisión es siempre ascendente, aunque hasta ahora el mayor pico de audiencia se ha registrado casi siempre durante la actuación española.
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