'Lolita tiene un plan': autenticidad digna y sin pretensiones

La naturalidad y las anécdotas que encumbraron a Lolita Flores como uno de los miembros más necesarios del plantel de jueces de 'Tu cara me suena' han desfilado este lunes, 7 de agosto, por el nuevo espacio de entretenimiento estrenado en La 1.

Como un mero desquite a la marcha de Bertín Osborne a Telecinco, Televisión Española ha lanzado su 'Lolita tiene un plan' con la intención de devolver a sus espectadores la esencia de un formato que presenta a un conocido anfitrión abriendo las puertas de una casa a un amplio plantel de personajes reconocibles por el gran público.

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Vuelve el buen hacer al prime time de TVE

Pese a que la respuesta de Televisión Española a Osborne llega año y medio tarde, es innegable que, al menos, Gestmusic, el equipo que comanda este nuevo espacio, ha conseguido dar una vuelta de tuerca a una manoseada idea, consiguiendo una ejecución llena de autenticidad y sin atisbo de pretensiones.

Sin la entrevista como hilo conductor y siendo reformulado como una (demasiado) inocente charla entre amigos, Lolita cambia el tono fisgón y teledirigido de Osborne por una conversación que devuelve el buen hacer y dignidad al prime time de una cadena que acumula más de una veintena de fracasos en el área de entretenimiento durante esta última temporada.

'Lolita tiene un plan', la vuelta del buen hacer al prime time de una cadena que acumula más de 20 fracasos esta temporada

La mayor del clan Flores aleja de los formatos de entrevistas el matiz cotilla y heteropatriarcal de Mediaset España para dar paso a un espacio que no bebe de personajes de máxima actualidad, de un titular efectista o de conversaciones a la carta. 'Lolita tiene un plan' huye de la retroalimentación y encorsetamiento al que Bertín ha tenido que doblegarse en su aterrizaje a Telecinco para sustentar de contenido o servir de promoción a otros espacios de la cadena.

Sin preguntas polémicas, indignas de un canal con intención de ofrecer servicio público, Gestmusic sirve a Televisión Española un producto carente de maldad, en la línea en la que debe seguir creciendo nuestro primer canal, y con varias taras que solventar en próximas entregas. Entre ellas, su ritmo lánguido, una mejorable y desacertada selección musical y la invasiva e injustificada manera de TVE de sacar pecho de su archivo histórico a base de unos abruptos cortes de edición que arruinan parte del clímax del espacio.