Jordi Évole noquea a Inés Arrimadas y a Marta Rovira con un sencillo test

'Salvados' regresó este domingo, 3 de noviembre, con una nueva entrega centrada en la situación actual de Cataluña. En esta ocasión, Jordi Évole invitó a las dos candidatas que representan a los partidos con más posibilidades de ser las dos listas más votadas en las próximas elecciones del 21 de diciembre: Inés Arrimadas y Marta Rovira.

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Durante el debate hubo algún que otro momento de tensión y quedó clara la división en Cataluña, pero el cara a cara entre Arrimadas y Rovira tampoco se recordará por su crudeza. Lo cierto es que Évole, que ejercía el papel de moderador, cambió de estrategia para abrir el debate. En esta vida hay dos tipos de entrevistadores: los que van aumentando poco a poco la dureza de las preguntas y los 'boxeadores', que prefieren empezar con un derechazo a modo de pregunta desde el minuto cero. Por lo general, Évole es más de los primeros, pero en esta ocasión se puso los guantes y la primera pregunta golpeó en las frentes de las invitadas.

Seguramente, Évole se lo veía venir. Las dos candidatas llevan más de un mes inmersas en una campaña electoral en la que el 'procés' monopoliza el debate en radio, prensa y televisión. Así que el periodista catalán se alejó de las elecciones para poner el foco en cuatro temas de capital importancia que han desaparecido del debate para el 21-D.

Paro, educación y violencia de género

"¿Me podrían decir que tasa de paro hay en Cataluña?", comenzó preguntando Évole. Arrimadas se tiró a la piscina: "Alrededor del 20%". Rovira la acompañó en su respuesta: "Estoy de acuerdo y con noticias positivas". Pues va a ser que no. "Un 12,5%", reveló el periodista catalán.

Sobre los refugiados pasaron de puntillas. Lo mismo con la educación, aunque en esta ocasión Arrimadas estuvo más acertada que su rival política. La cifra de mujeres asesinadas por violencia de género en Cataluña también fue un dato al que no supieron contestar ninguna de las dos. Rovira intentó adornarse hablando de acuerdos en el Parlament, pero de datos de la triste realidad actual... Cero patatero.