María Lapiedra explota por los ataques de Mila Ximénez en 'Sálvame'

María Lapiedra acudió a 'Sálvame,' este viernes 20 de abril, y su gesto, nada más empezar, no era una buena señal. "He estado un mes pensando en muchas cosas y realmente solo me importa la gente que quiero, no lo que opinen los demás", dijo al inicio de la entrevista, siendo consciente que su paso por 'Supervivientes' ha decepcionado a muchos, entre ellos sus compañeros de programa.

El bloque tampoco empezó con buen pie para la catalana, que se sintió ofendida con la broma que organizó el programa, al vestir a Gustavo González como 'David, el gnomo', el personaje infantil que 'vive con una seta'. "Me consta que has estado llorando en la sala VIP y me gustaría saber por qué has llorado", le pregunto Carlota Corredera. "Por todo", confesó María Lapiedra. Durante la entrevista explicó algunos detalles de su regreso. Admitió visitar a un psicólogo y sentirse descentrada. También recordó que está en pleno proceso de divorcio. "Pero, ¿por ver a Gustavo de gnomo?", volvió a insistir la presentadora en alusión a sus lágrimas en el camerino. "Pues sí, porque es denigrante", declaró.

La exconcursante de 'Supervivientes' quiso zanjar algunos asuntos que colean sobre su participación. "Ya he hablado con la productora, estoy pagando mi penalización. Es mi castigo y punto". También asumió su carácter poco proclive a interactuar en los realities: "Hay gente que sirve para los realities y otra que no. Yo me he dado cuenta que no sirvo, pero hasta que no he ido a un reality no lo he sabido", asumió.

[Más información I 'Supervivientes 2018': María Lapiedra abandona: "Necesito estar con mis hijas"]

Bronca con Mila Ximénez

​Mila Ximénez fue menos comprensiva: "¿Tu has visto el vídeo de presentación que hacemos todos cuando vamos a la isla? ¡Que lo pongan! A ver si en algún momento esta señora tiene algún síntoma de estar descentrada", le echó en cara. "Me voy a la isla porque me hace muchísima ilusión", dijo con ironía, imitando su voz suave.

María Lapiedra (sobre Mila): "Al menos yo soy dulce, no como ella, que se ríe cuando soy educada y digo 'gracias'"

En ese momento, María Lapiedra explotó: "¡No hace falta que me faltes el respeto así", gritó. "Prefiero tener mi tono de voz que el tuyo", le respondió. Sus compañeros, entonces, intentaron mediar, pero María ya no escuchaba y solo se defendía: "Al menos yo soy dulce, no como ella, que se ríe cuando soy educada y digo 'gracias'. Prefiero ser educada y dulce y no ella que no la soporta nadie", declaró cada vez más enfadada.

Mila continuó atacando: "¿Sabes la diferencia entre tú y yo?", le aseguró. "Sí, que yo soy joven y guapa, y tú no. ¿Quieres guerra, pues la tendremos?", contraatacó Pascualina. El plató para entonces ya estaba ardiendo. Gustavo González no sabía dónde meterse y se llevaba las manos a la cabeza. "¡Lleva un mes ofendiéndome y estoy harta!, ¿vale?", volvió a gritar la catalana.

Lejos de calmarse las aguas, todavía fueron a más: "La diferencia entre tú y yo es que cuando yo era joven y guapa no bailaba en los hoteles en Sevilla, me ganaba la vida currando", espetó Mila Ximénez. Las indirectas fueron subiendo de tono,. "Prefiero bailar en un hotel, y mantener a mis hijas bien, que no aquí, rajando de todo el mundo", insinuó Lapiedra, en una tarde en la que, para ambas, sin duda, habrá dejado huella, y no para bien.