Consejos para estar motivado en el trabajo

La motivación es importante en muchos aspectos de la vida, por ejemplo, cuando intentamos sentirnos mejor y tomamos la decisión de comenzar a cuidarnos. El ejercicio físico es una de esas actividades que todos somos conscientes de los muchos beneficios que nos aporta, pero no siempre encontramos la motivación necesaria para comenzar una rutina y mantenerla.

Sucede algo similar con la alimentación, con la meditación… y también con el trabajo. Somos conscientes de lo relevante que es el trabajo en nuestro día a día, no solo económicamente, también puede ser una forma de satisfacción y realización personal. A pesar de ello, la desmotivación en el trabajo es una cuestión bastante frecuente.

Incluso si encuentras el trabajo de tus sueños, ese que te apasiona, puede haber ocasiones en las que esa motivación no aparezca, temporadas en las que sientes que no creces, que no progresas o que no se te valora. El ambiente de trabajo también puede influir, la relación con tus jefes o tus compañeros, pero hay una parte que solo depende de nosotros, pequeños tips que se pueden poner en práctica para lograr que llegar motivados al trabajo resulte más sencillo.

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Consejos para estar motivado en el trabajo

Lo cierto es que encontrar motivación en el trabajo no es tan diferente de hacerlo en otros aspectos de la vida, hay algunos puntos que son comunes, como la importancia de macarse objetivos. Tener claro hacia dónde queremos que vaya nuestra carrera profesional puede ser infalible a la hora de tener la motivación necesaria.

Está bien tener una meta general, pero también marcarse objetivos en el día a día. Dividir el proyecto en pequeñas parcelas que sean más sencillas de abordar (y de finalizar con éxito) puede ayudar a que la tarea que tenemos delante sea más llevadera y también más accesible. Esto ayuda a planificar y evitar situaciones de estrés excesivo.

En ocasiones nos enfrentamos a tareas que no son nuestras preferidas, en todos los trabajos las encontramos, incluso en el de nuestros sueños. No es mala idea ayudarnos a que sean más divertidas, por ejemplo, creando una playlist que nos ayude a que el tiempo pase más deprisa o que favorezca la concentración.

Somos conscientes que un trabajo bien hecho es la mejor recompensa, pero nunca está de más premiarnos de alguna forma cuando conseguimos el objetivo que nos habíamos marcado. Algo tan sencillo como establecer una recompensa al alcanzar el objetivo deseado puede ser muy motivador, incluso tener recompensas extra si conseguimos hacerlo antes del tiempo que nos habíamos marcado.

No es una buena idea intentar hacer más cosas de las que podemos, es mejor no intentar realizar varias tareas a la vez, sino centrarnos en una y, una vez finalizada, pasar a la siguiente. Si intentamos hacerlo todo a la vez corremos el riesgo de dejar cosas a medias o de perder la concentración en el peor momento posible. Eso sin contar que puede suponer un estés añadido que no necesitamos.

Lo mejor es no procrastinar y una buena forma de conseguirlo es con una buena planificación. Un trabajo bien organizado, con las prioridades claras y los plazos bien definidos, no permite aplazar las tareas marcadas. Evita distracciones innecesarias, pero no olvides que los descansos son necesarios.

No podemos olvidar lo importante que es tener tiempo para nosotros mismos, saber desconectar, aunque tengamos las herramientas de trabajo siempre delante. Es importante cuidar de nuestro bienestar, nuestra alimentación y descanso, dormir bien, sacar tiempo para despejarnos y disfrutar de la familia y los amigos, de nuestro tiempo de ocio.

Estos consejos no son infalibles, si ya lo has probado todo y acudir al trabajo sigue siendo un esfuerzo ímprobo, tal vez sea el momento de un cambio laboral.