¿Qué hacer si tu hijo o hija te pide adelgazar? La nutricionista Gabriela Uriarte te da las claves

Ver a los hijos luchando por su peso y su aspecto, es una de las cosas más difíciles, pues, tal y como ha explicado la nutricionista Gabriela Uriarte, normalmente ocurre porque alguien del exterior, les ha hecho cuestionarse.

En estas situaciones lo más importante que debe comprender el padre, es que lo que realmente necesita su hijo es tener una aceptación incondicional, sea cual sea su físico. Por ello, optar por ponerles a dieta puede reforzar la idea de que deben cambiar, para ser aceptados.

De esta forma, la experta en alimentación, recomienda que lo mejor que se puede hacer es promover una alimentación saludable, pero para toda la familia y no solo para el niño o la niña que ha mostrado preocupación por su peso.

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Es utilizando esta técnica, que los padres pueden hacer ver a sus hijos que la comida no es un medio para adaptarse a los estándares de la sociedad. Además, la nutricionista, incide en la importancia de que si el niño tiene que hacer dieta, el objetivo nunca puede ser modificar su cuerpo, sino que esté más sano e introducir alimentos más nutritivos en su rutina.

Otra clave que da, es que es mucho más interesante promover la aceptación hacia uno mismo, antes que cualquier otro método. En este sentido, que los padres eviten comentarios negativos hacia sus propios cuerpos o el cuerpo de otros, también es muy importante para que sus hijos se acepten.

El aumento de peso que pueden tener los hijos, pueden ser por causas ajenas a su control o a su comportamiento individual, a menudo son causas complejas y por ello, es fundamental que los padres no culpen o castiguen a sus hijos por esta subida de peso.

Mantener una comunicación abierta también es primordial. Los progenitores deben escuchar de forma atenta a sus hijos, pues es este tipo de empatía lo que hace que ellos expresen sus sentimientos y preocupaciones, pues saben que sus padres están ahí para ayudarles y no para juzgarles.

Además, es mediante este tipo de escucha, que los padres podrán descubrir los motivos de los deseos de sus hijos de adelgazar. Puede haber diversas influencias externas, como presiones sociales o idealizadas, que ahora en la época de las redes sociales son muy comunes. Conocer la fuente de su anhelo de perder peso, es importante para ayudarles.

En definitiva, lo que se busca es el bienestar promoviendo hábitos saludables, como hacer ejercicio o comer bien, pero nunca para modificar la apariencia. Teniendo esto en mente, los padres podrán evitar que los hijos tengan una relación negativa con la alimentación más adelante, al igual que mejorarán su bienestar emocional.

Sin embargo, si existe una sospecha de que el niño o niña esté lidiando con problemas de imagen corporal o trastornos alimentarios, es muy importante acudir a un profesional de la salud mental especializado en estos temas, pues son ellos los que pueden dar las recomendaciones necesarias.

Además, hay que recordar que cada situación es única, y es importante abordarla de manera individualizada y adaptada a las necesidades del niño. Lo más importante es mantener una relación de confianza y apoyo, brindando un ambiente positivo y saludable en el hogar.