Coach Exit, la fórmula para ayudar a los adolescentes a no abandonar el colegio

La tasa de abandono temprano de la Educación en España es una cifra preocupante. Aunque en los últimos 10 años se ha reducido en 11 puntos, aún un 13.9% de los jóvenes menores de 20 años deja de estudiar demasiado pronto. Para mejorar estos datos se han impulsado medidas de atención a la diversidad durante el periodo de la E.S.O. y se han implantado programas de orientación con el objetivo de mantener a los adolescentes en el instituto hasta finalizar la educación no obligatoria. Hablar con ellos no es fácil, pero hay que comprender sus situaciones y poner remedio.

Tanto instituciones públicas como empresas privadas están trabajando para lograr mantener a los jóvenes implicados en su educación. Se han creado diferentes programas y fórmulas para seguir disminuyendo el alto porcentaje de abandono escolar temprano. No se puede consentir que casi un 14% de los adolescentes abandonen sus estudios tras finalizar la etapa obligatoria, por eso se trabaja para que encuentren su vocación y se orienten a estudiar algo que les apasione y les prepare para el futuro.

Una de las fórmulas para evitar el abandono escolar es el programa Coach Exit, impulsado por el Banco Santander y la Fundación Exit. Es una iniciativa de voluntariado corporativo. Su finalidad es orientar y motivar a jóvenes vulnerables socialmente, que provienen de una situación de fracaso escolar, a través del acompañamiento en diferentes sesiones de coaching y de mentoring.

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Para ello, la Fundación Exit forma a voluntarios de empresas socialmente responsables y trabajadores del Banco Santander para que puedan ejercer de coach de jóvenes con situación de vulnerabilidad. Los acompañantes trabajan con los adolescentes durante dos meses para animarlos a seguir estudiando y que logren sus objetivos profesionales.

El programa arrancó en 2015 con 15 jóvenes de entre 16 y 19 años. Hasta el momento, cerca de 200 adolescentes han logrado completar sus estudios gracias a esta fórmula, mediante 6 sesiones de apoyo en las que comprenden la importancia de la educación y conocen una profesión desde dentro. Algunos de ellos, han conseguido un puesto de trabajo en las empresas de sus coaches.

Con este método, los adolescentes conocen las empresas desde dentro y se cuestionan su verdadera vocación. Es positivo tanto para los jóvenes como para los voluntarios, ya que también aprenden sobre otras realidades y desarrollan su empatía e inteligencia emocional.