La apuesta de Joaquín Prat por el ayuno intermitente y la opinión de Ana Rosa Quintana

El ayuno intermitente es una práctica de alimentación que ha ganado popularidad en los últimos años debido a sus posibles beneficios para la salud y sobre todo, a la hora de perder peso. Esta estrategia consiste en alternar períodos de ayuno y alimentación en un patrón específico, en lugar de seguir una dieta tradicional de cinco comidas al día.

Uno de los adeptos a este estilo de alimentación es Joaquín Prat, enamorado en este momento de una enfermera, quien defendió los motivos que le han llevado a seguir el ayuno intermitente ante su amiga y compañera, Ana Rosa Quintana. A través de una conversación en plató, a principios de primavera el presentador comentó que él no desayunaba ni comía nada desde la cena hasta que llegaba la hora del almuerzo en los estudios de Telecinco.

En ese sentido, el periodista defendió que este tipo de alimentación y horarios a la hora de las ingestas hace que, aunque pueda parecer lo contrario, "su mente se mantenga despierta". En ese punto de la conversación en el que los diversos colaboradores estaban dando su opinión al respecto, la afirmación de Ana Rosa Quintana al respecto era nítida.

"Yo soy más de bocadillo de panceta", decía la presentadora, ante el resto de colaboradores como Patricia Pardo, noticia ahora mismo por su embarazo con Christian Gálvez. Aunque la célebre comunicadora no restó un ápice de razón ante las opiniones del resto de compañeros, Quintana argumentó que no es un tipo de rutina que ella lleve a cabo, pese a señalar que desde el diagnóstico de su tumor intenta cuidarse en la mayor medida posible.

Cómo funciona el ayuno intermitente

El ayuno intermitente no tiene una estructura única; existen varios métodos comunes, como el ayuno de 16/8, donde se ayuna durante 16 horas al día y se viene en una ventana de 8 horas; el ayuno en días alternos, en el que se alterna entre días de ayuno completo y días de alimentación normal; y el ayuno 5:2, que implica comer con normalidad durante cinco días y reducir la ingesta calórica durante dos días no consecutivos. Estos patrones buscan ayudar al cuerpo a entrar en un estado de cetosis y aumentar la sensibilidad a la insulina, entre otros efectos positivos.

Asimismo, es esencial mantener una alimentación equilibrada y nutritiva durante los períodos de alimentación para garantizar que el cuerpo reciba los nutrientes necesarios, puesto que saltarse comidas o consumir alimentos poco saludables durante las ventanas de alimentación, puede afectar negativamente la salud general. Por eso, es recomendable consultar a un profesional de la salud para determinar si es apropiado según las necesidades y objetivos individuales.

Beneficios VS. riesgos

Entre los beneficios potenciales del ayuno intermitente se incluyen la pérdida de peso y grasa corporal, la mejora de la función metabólica, la reducción de la inflamación y la promoción de la longevidad. Además, algunos estudios sugieren que el ayuno intermitente puede tener efectos positivos en la salud cardiovascular, la salud cerebral y el riesgo de enfermedades crónicas. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los resultados pueden variar según el individuo y su estado de salud general.

Es más, en el caso del bioquímico Valter Longo, que está especializado en envejecimiento celular, ha desarrollado en su libro 'El ayuno contra el cáncer', toda clase de argumentos, apoyados en estudios científicos y ejemplos de enfermos reales, para defender el ayuno como un arma terapéutica contra los tumores. Su propuesta: matar de hambre al cáncer y nutrir al paciente.

Sin embargo, a pesar de los beneficios potenciales de este sistema de ingesta, cabe recordar que no es adecuado para todos y puede presentar ciertos riesgos. Las personas que padecen trastornos alimentarios, diabetes, hipoglucemia o problemas de salud subyacentes deben evitar el ayuno intermitente o realizarlo bajo supervisión médica. Además, algunos individuos pueden experimentar efectos secundarios como mareos, fatiga, irritabilidad o dificultades para desarrollar los períodos de ayuno.

Es por todo esto por lo que siempre se recomienda que cualquier tipo de dieta o sistema alternativo de ingesta alimentaria sea controlado por un profesional, puesto que cada cuerpo es único y lo que funciona para una persona no puede ser lo mejor para otra. La clave está en encontrar un enfoque nutricional que sea sostenible y adecuado para nuestra propia salud y bienestar, tal y como señalan algunos expertos de la materia.