Dieta forking o cómo adelgazar y perder peso usando solo un tenedor para cenar

Entre todas las dietas que han sido creadas para ayudarnos a perder peso y conseguir nuestros objetivos saludables, que no son pocas, podemos distinguir dos grandes grupos: las que nos invitan a adelgazar de forma rápida o puntual y aquellas que buscan resultados más lentos pero más efectivos, que puedan mantenerse a largo plazo.

La dieta forking es de las segundas y solo nos pide un pequeño cambio en nuestras vidas, que la cena la hagamos con un tenedor. No hace falta que siempre sea el mismo, no se refiere a eso, el nombre -fork es tenedor en inglés- hace referencia a la forma en la que comeremos nuestra cena, alimentos que podremos tomar con tenedor.

Esto quiere decir que, durante esta comida del día no podremos emplear otro tipo de cubierto, ni cuchara ni tampoco cuchillo y evidentemente quedarán fuera de nuestros menús todos esos alimentos que normalmente comemos con las manos, como las pizzas y hamburguesas, pero también canapés, bocadillos, embutidos o marisco.

La cena se tomará con esta herramienta y no podremos ayudarnos de un cuchillo para cortar los pedazos que tomemos. Así, nos podemos hacer una idea de los alimentos que quedan fuera y en cuáles se basa para que preparemos nuestras cenas. Olvídate de las sopas y yogures, que requerirían una cuchara, también de la carne, la mantequilla o los quesos de untar, así como de las frutas.

Están permitidas las verduras y las ensaladas, así como algunas legumbres como las lentejas, guisantes, judías verdes o garbanzos, siempre que no sean en guisos caldosos. También podremos tomar cereales como la pasta o el arroz, pero sobre todo pescados, que se pueden trocear sin problema solo con el tenedor.

Esta dieta tiene otra versión, una más restrictiva donde se presta atención a la forma de preparar los alimentos y en la que también estará prohibido tomar aquellos que para su preparación necesiten el uso del cuchillo. En su versión más accesible o liviana esto no será relevante, ayudando a una pérdida de peso paulatina solo con este pequeño cambio en nuestras costumbres.

Se espera que siguiendo estas pautas se puedan llegar a perder uno o dos kilos cada tres semanas, como ya hemos apuntado esta es una forma de adelgazar de forma lenta pero constante, y fue diseñada para que los cambios fueran duraderos, apostando por una pérdida de peso que no volverás a recuperar y un estilo de vida saludable, siguiendo una dieta equilibrada.

Antes de comenzar la dieta forking, así como cualquier otro plan alimenticio diseñado para ayudarnos a adelgazar, debemos consultar con un médico o nutricionista. Ellos serán quienes puedan asegurarnos de que los pasos que damos para cambiar nuestra vida son en la buena dirección y sin poner en riesgo nuestra salud.