Esta especia (que puedes cultivar en casa) es antiinflamatoria y ayuda con el intestino irritable

El síndrome de intestino irritable es un trastorno que afecta a todo el tracto gastrointestinal, especialmente al colon. Es muy frecuente en nuestro país y también es conocido como colon irritable. Se calcula que lo sufren entre un 2 y un 12% de la población, sobre todo mujeres. Es la causa más habitual en la consulta del médico por dolor intestinal y quienes lo sufren tienen una calidad de vida muy afectada, porque les es difícil acudir a eventos sociales o de trabajo e incluso viajes.

Se desconoce la causa que lo produce, pero sí se sabe que el romero cuenta con propiedades antiinflamatorias que ayudan a aliviar el dolor y la inflamación cuando se sufre este síndrome, al igual que también es útil contra la artritis y la fibromialgia.

Una hierba aromática que puedes incluso cultivar en casa porque su apariencia es muy atractiva y desprende una fragancia muy agradable. Puede cultivarse en macetas o en el jardín, además de necesitar poco riego y ser muy resistente.

El romero es rico en antioxidantes, flavonoides y otros compuestos que benefician a tu salud. Entre sus beneficios más conocidos está su capacidad para mejorar la función cognitiva. Varios estudios han demostrado que ayuda a mejorar la concentración, la memoria y la atención. Incluso ayuda a reducir el estrés y la ansiedad. Pero también, gracias a sus antioxidantes, combate el envejecimiento. El romero ayuda a proteger las células del daño oxidativo, por lo que también es bueno para el cuidado de la piel y el pelo.

Si tienes síntomas de colon irritable, acude a tu médico y sigue sus indicaciones. Pero no te olvides del romero. Los síntomas del síndrome de intestino irritable son dolor abdominal, hábito intestinal alterado e irregular, a veces con diarrea y a veces con estreñimiento, hinchazón abdominal, sensación de evacuación incompleta, moco en las heces...

La dieta puede actuar como desencadenante de los síntomas en personas predispuestas a este síndrome. El conocimiento del funcionamiento del intestino y un cambio en los hábitos dietéticos pueden mejorar su sintomatología.