Esta práctica aumenta la felicidad tanto como caminar o salir con amigos, según la Universidad de Princeton

Un reciente estudio de la Universidad de Princeton (Nueva Jersey) ha descubierto que la jardinería puede incrementar la felicidad de las mujeres de manera similar a la que producen actividades como caminar o salir a cenar con amigos.

Los investigadores analizaron quince actividades distintas y hallaron que solo la jardinería y la horticultura doméstica ofrecen beneficios emocionales.

Según una de las autoras del reciente estudio publicado en la página web de la universidad estadounidense, Anu Ramaswami: "la jardinería no solo proporciona frutas y verduras frescas, sino que también promueve la actividad física y el bienestar emocional".

La profesora de ingeniería civil y ambiental de Princeton ha señalado también las bondades de esta práctica al permitir una conexión profunda con la naturaleza, ofreciendo un sentido de logro personal.

La jardinería permite disfrutar del paso del tiempo de manera consciente, alejándonos de la inmediatez que domina nuestra vida cotidiana. La paciencia requerida para ver crecer las plantas activa la dopamina de una forma más lenta y duradera, lo que contribuye a un bienestar emocional más sostenible y duradero.

Además, figuras públicas como Kate Middleton han adoptado la jardinería como una herramienta para mejorar su salud mental y combatir el estrés.

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La jardinería ofrece una estimulación equilibrada y rica, permitiendo a nuestras mentes descansar, relajarse y recuperarse del ajetreo diario.

Incorporar la jardinería en la rutina diaria

Incorporar la jardinería en la rutina diaria puede ser una excelente manera de mejorar nuestra calidad de vida y encontrar una fuente de felicidad duradera. El estudio destaca cómo esta práctica puede igualar los beneficios emocionales de otras actividades sociales.

Así pues, la jardinería no solo mejora el bienestar mental, sino que también fomenta hábitos saludables, como el consumo de alimentos frescos y la realización de ejercicio físico. Este estudio subraya la importancia de las actividades conectadas con la naturaleza para un bienestar integral.