La clave para detectar si alguien te está mintiendo está en estos gestos

El lenguaje corporal permite, de la mano de los expertos, ver mucho más allá de lo que las palabras revelan. Así, de la gestualidad de Leire Martínez a las claves corporales de José Luis Martínez- Almeida, son muchas las ocasiones en las que recurrimos a él para conocer más a fondo a un personaje.

Sin embargo, también es muy útil en el día a día, por ejemplo, a la hora de detectar mentiras. Descubrir quién está diciendo una mentira puede ser un desafío, pero gracias al análisis del lenguaje corporal y las microexpresiones faciales, los expertos han encontrado pistas clave que revelan las verdaderas emociones de una persona.

Una tarea que no siempre es sencilla, pero para la que contamos con aliados como el especialista en comunicación no verbal y abogado, José Luis Martín Ovejero, que reveló en una entrevista para Onda Cero una de las mejores clave para identificar si alguien está mintiendo. Así, más allá de algunos mitos, el experto pone el foco en la importancia de las microexpresiones.

Es decir, la mejor pauta para intentar detectar una mentira no está en un solo gesto, sino en estar atento a todos esos breves movimientos musculares que reflejan emociones intensas y primarias, como la alegría, el miedo, el asco o la ira. Unas expresiones, casi imperceptibles si no se presta atención, que duran apenas una fracción de segundo, pero son extremadamente reveladoras.

El poder de las microexpresiones en la mentira

Así, según desveló Martín Ovejero en Onda Cero, "el cerebro lanza estas activaciones automáticas cuando sentimos emociones intensas, y dado que son tan rápidas, es difícil ocultarlas". Aunque, detectar estas microexpresiones requiere práctica, ofrecen una ventaja significativa a la hora de descubrir si alguien está siendo honesto o no. Por ello, diversos estudios, como los del doctor en psicología Paul Ekman, han demostrado que con el entrenamiento adecuado, las personas pueden aumentar su capacidad para reconocer estas microexpresiones faciales hasta en un 90%.

Además, Martín Ovejero explicó que no hay gestos concretos que, por sí mismos, indiquen con certeza que alguien está mintiendo. Sin embargo, existen comportamientos que pueden levantar sospechas. Una de las claves está en observar lo que la persona deja de hacer. Por ejemplo, una persona que normalmente gesticula mucho mientras habla, puede volverse repentinamente rígida cuando miente. Un fenómeno conocido como el efecto estatua que se produce porque el cerebro concentra sus recursos en construir la mentira, dejando de lado los gestos habituales.

Además, hay gestos que Martín Ovejero llama "manipuladores", como tocarse el cabello, ajustar la ropa o manipular objetos cercanos. Estos movimientos son reflejos del estrés que provoca mentir, y el cerebro los utiliza para calmarse de manera instintiva. Aunque, a nivel general, indica que el mejor indicio para detectar a un mentiroso está en gestos que no fluyan con naturalidad, esas repentinas microexpresiones, pero también en el giro no verbal que se produce cuando cambian de tema.