El truco fácil y barato para quitar las manchas de moho de las juntas del baño y la cocina

Eliminar el moho negro incrustado en las juntas de baños y cocinas es una tarea tediosa para muchos, y es común probar varias soluciones sin obtener resultados duraderos. Sin embargo, un nuevo truco ha surgido entre expertos en limpieza que promete hacer esta labor mucho más sencilla, rápida y sin recurrir a químicos agresivos. Este método devuelve el brillo a tus juntas en pocos minutos y que además respeta el medio ambiente.

El moho negro suele aparecer en áreas con alta humedad, como baños, cocinas, e incluso en dormitorios mal ventilados. Este hongo, además de ser desagradable a la vista, puede provocar problemas de salud si no se controla adecuadamente. Mantener estos espacios libres de moho no solo es esencial para la higiene del hogar, sino también para proteger la salud de quienes lo habitan.

La solución sorprendentemente sencilla que recomiendan los expertos consiste en una mezcla de agua y bicarbonato de sodio, un limpiador natural que probablemente ya tienes en casa. Para aplicar este método, solo necesitas disolver una cucharada de bicarbonato en un litro de agua. Luego, con ayuda de un cepillo (incluso un cepillo de dientes viejo), frota las juntas afectadas y observa cómo el moho desaparece con poco esfuerzo. Tras este proceso, enjuaga con agua limpia y seca bien el área con una toalla para evitar que la humedad persista y el moho vuelva.

Si necesitas alternativas adicionales para una limpieza profunda, existen otras técnicas efectivas que también pueden ayudar. Puedes diluir 250 mililitros de lejía en un cubo de agua, aplica sobre las manchas y deja actuar unos minutos antes de frotar. Este método es efectivo pero requiere precaución al manipular lejía. El detergente también puede utilizarse con éxito en esta tarea. Aplícalo de la misma manera que el método del bicarbonato.

Aunque el amoníaco es un producto más fuerte, se puede utilizar en superficies de vidrio o azulejos, siempre con precaución y en áreas bien ventiladas. Este clásico de la limpieza también es un aliado contra el moho. Mezcla vinagre y agua y aplícalo sobre las zonas afectadas, dejando actuar unos minutos antes de enjuagar.

Evitar la acumulación de moho negro en las juntas es posible si se mantienen ciertas precauciones en el hogar. Ventilar las habitaciones frecuentemente y mantener abiertas las puertas y ventanas es una medida sencilla pero efectiva. Prestar especial atención a las estancias más húmedas, como el baño, y secar bien las superficies después de su uso también ayuda a prevenir el crecimiento de moho.