Cómo prevenir la halitosis: causas y soluciones
Algunas afecciones o enfermedades, como ciertos tipos de cáncer, también pueden provocar mal aliento
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Aproximadamente el 25% de la población española sufre halitosis. Esta afección puede repercutir en la autoestima y la forma en que los demás nos perciben. A veces, los síntomas pueden atribuirse a comidas específicas, pero en otras ocasiones, el problema es más profundo, y descubrir su origen es importante para controlarlo y ponerle solución.
Investigaciones como las publicadas en la Universidad de Harvard y en la revista 'European Journal of Oral Sciences' han identificado algunas de las causas y sus posibles tratamientos. Con una tan solo una serie de cambios en la rutina de higiene, es posible controlar y prevenir el mal aliento.
Entre las causas principales de la halitosis, se encuentran la mala higiene oral y la sequedad bucal. Los restos de comida en la boca fomentan la proliferación de bacterias que generan compuestos sulfurados volátiles (VSC), responsables del mal olor. Además, el consumo de ciertos alimentos como el ajo, así como el tabaco y las restauraciones dentales defectuosas, pueden agravar esta condición.
Asimismo, la lengua también es un foco de acumulación de bacterias. Diversos estudios han comprobado que los aceites esenciales de menta, eucalipto y tomillo ayudan a reducir estos microorganismos al actuar sobre la membrana bacteriana, disminuyendo así la emisión de dichos compuestos sulfurados y el mal olor asociado.
Con el fin de mejorar la salud bucodental y prevenir este problema, los expertos recomiendan cepillar los dientes dos veces al día, usar hilo dental y acudir al dentista para limpiezas y revisiones regulares, al menos, una vez al año. Además, el estudio expuesto en 'European Journal of Oral Sciences' sugiere el uso de enjuagues bucales con aceites esenciales, como los de canela o clavo. Estos aceites, reconocidos por su actividad antibacteriana, inhiben la formación de 'biofilms' y ofrecen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que benefician a la salud oral en general.
Un estudio publicado en el 'Journal of the Canadian Dental Association' también señala la existencia de la pseudo-halitosis o halitofobia; una condición que lleva a las personas a creer que tienen mal aliento sin que esto sea real. Según la investigación, estos pacientes suelen interpretar ciertos gestos de los demás como una reacción a su supuesto mal olor. En este tipo de situaciones, lo mejor es buscar ayuda psicológica, que ayude a las personas que la sufren a manejar la ansiedad y mejorar su calidad de vida.
De todas formas, si tienes dudas sobre la halitosis y cómo tratarla, lo mejor es que acudas a un profesional de salud para que pueda ayudarte a resolver todas tus preguntas, teniendo en cuenta tus circunstancias concretas.
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Aproximadamente el 25% de la población española sufre halitosis. Esta afección puede repercutir en la autoestima y la forma en que los demás nos perciben. A veces, los síntomas pueden atribuirse a comidas específicas, pero en otras ocasiones, el problema es más profundo, y descubrir su origen es importante para controlarlo y ponerle solución.