Las cuatro dietas que prolongan la esperanza de vida según Harvard
La dieta mediterránea, caracterizada por un alto consumo de alimentos de origen vegetal, grasas saludables y una ingesta moderada de productos lácteos y alcohol, mostró beneficios significativos
Las dietas que alargan la esperanza de vida, según Harvard (Pexels)
Un estudio de la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de Harvard ha revelado que seguir una alimentación saludable puede reducir hasta en un 20% el riesgo de muerte prematura. Tras analizar datos recopilados durante 36 años de más de 100.000 personas, los investigadores encontraron que quienes seguían alguno de los cuatro patrones dietéticos saludables tenían menos probabilidades de fallecer por enfermedades cardiovasculares, cáncer o afecciones respiratorias. Estos hallazgos, publicados en JAMA Internal Medicine, respaldan la importancia de una dieta equilibrada para mejorar la longevidad.
Como informan en 65ymás, los expertos evaluaron la adherencia a cuatro dietas recomendadas por las Guías Alimentarias para Estadounidenses (DGA). La dieta mediterránea, caracterizada por un alto consumo de alimentos de origen vegetal, grasas saludables y una ingesta moderada de productos lácteos y alcohol, mostró beneficios significativos. También se analizó el Índice de Dieta Vegetal Saludable, que prioriza los alimentos de origen vegetal y excluye por completo los de origen animal, incluidos los considerados saludables, como el pescado y los lácteos.
El brocoli y la calabaza, junto a otros vegetales, grandes aliados para la salud. (Pexels/Cup of Coupl)
Otro de los patrones estudiados fue el Índice de Alimentación Saludable 2015, basado en reducir el consumo de carnes rojas y procesadas, así como de azúcares y grasas no saludables. Finalmente, el Índice Alternativo de Alimentación Saludable, desarrollado por científicos de Harvard, promueve una alimentación rica en vegetales y cereales integrales, permitiendo un consumo moderado de alcohol y evitando bebidas azucaradas y carnes procesadas.
Los resultados mostraron que todas estas dietas tienen en común el consumo de cereales integrales, frutas, verduras, frutos secos y legumbres, elementos clave para reducir el riesgo de enfermedades graves. Frank Hu, uno de los autores del estudio, destacó que estos hallazgos serán clave para la actualización de las Guías Alimentarias 2025-2030, ya que “es fundamental evaluar cómo las recomendaciones nutricionales impactan en la salud y la mortalidad a largo plazo”.
Un estudio de la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de Harvard ha revelado que seguir una alimentación saludable puede reducir hasta en un 20% el riesgo de muerte prematura. Tras analizar datos recopilados durante 36 años de más de 100.000 personas, los investigadores encontraron que quienes seguían alguno de los cuatro patrones dietéticos saludables tenían menos probabilidades de fallecer por enfermedades cardiovasculares, cáncer o afecciones respiratorias. Estos hallazgos, publicados en JAMA Internal Medicine, respaldan la importancia de una dieta equilibrada para mejorar la longevidad.