Ni en el baño ni en el dormitorio: esta experta explica qué fotos poner en casa según el Feng Shui

Las fotografías familiares decoran la mayoría de hogares, pero según el Feng Shui, no todas las imágenes deberían estar a la vista… y mucho menos en cualquier lugar. La experta en esta disciplina, Montserrat Beltrán, ha explicado de forma muy clara en el podcast 'Tiene sentido', qué tipo de fotos conviene tener en casa, y sobre todo, dónde sí y dónde no colocarlas para mantener la armonía energética.

“Si te gustan las fotos y quieres ponerlas en el recibidor, sí que aconsejamos que solo sean fotos de los que viven ahora en la casa”, indica Montserrat. Esta zona es la carta de presentación de nuestro hogar y, según el Feng Shui, es importante que refleje el presente y no el pasado.

La experta es clara en este punto: “Vale que no me reciba alguien que ya no está en este mundo… ni en esta casa”. Por eso, las fotos de hijos que ya se han independizado, por ejemplo, se pueden colocar “a partir del pasillo, el salón, donde tú quieras, menos en el dormitorio”.

En cuanto al dormitorio principal, Montserrat advierte: “No puede haber fotografías que sean que no sean de las personas que duermen ahí”. Es decir, no deberían estar presentes imágenes de hijos, padres, abuelos, ni de personas fallecidas. El dormitorio es un lugar reservado para el descanso y la intimidad, por lo que debe contener solo aquello que contribuya a esa paz. “Es decir, no tener fotografías de hijos, de padres, de abuelos, ni mucho menos de fallecidos en el dormitorio”, recalca.

También hay quien pone fotos en el baño, pero para Beltrán esto es un rotundo no. La recomendación es evitar completamente las fotos en esta estancia, que está relacionada con la eliminación y la limpieza, tanto física como energética.

En definitiva, las recomendaciones de Montserrat Beltrán siguen los principios tradicionales del Feng Shui, que no buscan rechazar los recuerdos ni las emociones, sino colocarlos en el lugar adecuado para que la energía fluya de forma equilibrada. Elegir con consciencia qué fotos se muestran y dónde se colocan puede influir más de lo que imaginamos en el ambiente del hogar.