David Callejo, médico: "¿Eres de los que pospone la alarma diez veces por la mañana? Parece que según los últimos estudios esto podría no ser tan malo"
Una costumbre tan común como posponer la alarma podría tener efectos positivos sobre el rendimiento y el bienestar, según nuevos estudios y voces médicas expertas
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F6ba%2F185%2F351%2F6ba1853517e6877c44f475afc33af12a.jpg)
- Mario Alonso Puig, cirujano, afirma: "El sueño alarga la esperanza de vida"
- Álvaro Campillo, doctor: "La mejor inversión que puede hacer el ser humano es dormir"
Para muchos, la rutina matutina incluye varias alarmas antes de abandonar la cama. Hasta ahora, esta costumbre se consideraba contraproducente, pero nuevas investigaciones y voces expertas empiezan a cuestionar esa idea. El descanso, al parecer, no siempre se rompe con esos "cinco minutos más".
El médico anestesista y divulgador David Callejo ha abordado este tema en un vídeo compartido en su perfil de Instagram. Según explica, “un estudio de este año nos ha enseñado que esto de posponer la alarma puede mejorar el rendimiento cognitivo, sobre todo en las personas a las que las mañanas les cuestan”. Aclara además que, contrariamente a lo que se creía, no se ha encontrado que este hábito perjudique la calidad del sueño a largo plazo.
Tradicionalmente, se pensaba que interrumpir el sueño con múltiples alarmas afectaba a los ritmos circadianos y generaba una sensación de cansancio acumulado. Y aunque este riesgo existe si la interrupción es agresiva o demasiado frecuente, los datos recientes matizan este temor.
Estudios realizados por instituciones como la Universidad de Estocolmo revelan que posponer la alarma de forma controlada —por ejemplo, durante los 30 minutos previos al despertar— puede ayudar a reducir la llamada inercia del sueño. Es decir, esa sensación de aturdimiento que muchas personas experimentan al levantarse bruscamente.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F9cc%2F58e%2Ffe8%2F9cc58efe8f0800c7dfc590a0fdb30700.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F9cc%2F58e%2Ffe8%2F9cc58efe8f0800c7dfc590a0fdb30700.jpg)
La explicación es sencilla: al despertar en fases ligeras de sueño durante esos minutos extra, el cuerpo tiene una transición más gradual hacia la vigilia, lo que mejora el estado de alerta y el rendimiento mental en las primeras horas del día.
Esto no significa que debamos abusar de la opción de repetir la alarma, pero sí que, en ciertos perfiles —como personas con cronotipos vespertinos o con dificultades para madrugar—, puede ser una estrategia útil dentro de una higiene del sueño adaptada a cada uno.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fb58%2F668%2Ffd9%2Fb58668fd931d7aad336d2f5edd25b9fe.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fb58%2F668%2Ffd9%2Fb58668fd931d7aad336d2f5edd25b9fe.jpg)
Como siempre, lo ideal es mantener una rutina constante y saludable, con suficientes horas de descanso. Pero si te cuesta arrancar por la mañana y usas una o dos alarmas extra para salir de la cama, ahora sabes que quizá no sea tan mala idea. En cualquier caso, consultar con un especialista en sueño es la mejor forma de adaptar los hábitos a nuestras necesidades reales.
- Mario Alonso Puig, cirujano, afirma: "El sueño alarga la esperanza de vida"
- Álvaro Campillo, doctor: "La mejor inversión que puede hacer el ser humano es dormir"
Para muchos, la rutina matutina incluye varias alarmas antes de abandonar la cama. Hasta ahora, esta costumbre se consideraba contraproducente, pero nuevas investigaciones y voces expertas empiezan a cuestionar esa idea. El descanso, al parecer, no siempre se rompe con esos "cinco minutos más".