Esta es la peligrosa técnica de manipulación psicológica de la que advierten los psicólogos: "Puede afectar a tus recuerdos"

• La técnica que debes usar con las personas que recurren a la manipulación emocional, según la psicología
• La técnica que debes usar con las personas que recurren al chantaje emocional, según la psicología

Dentro de las relaciones de pareja y otros vínculos emocionales, existen formas de manipulación que actúan de forma silenciosa, pero profundamente destructiva. Una de las más peligrosas, según los psicólogos, es el 'gaslighting'. Esta técnica de abuso psicológico no solo altera la percepción de la realidad, sino que puede llegar a afectar a los recuerdos y a la estabilidad emocional de quien la sufre, generando confusión, dependencia emocional e, incluso, ansiedad.

El gaslighting opera con la distorsión de los hechos cotidianos, la negación constante de situaciones vividas y la siembra de dudas en la mente de la víctima. El objetivo de quien lo ejerce no es solo ganar poder sobre el otro, sino controlar su interpretación de la realidad.

Esta táctica se basa en desacreditar la memoria, los sentimientos y la intuición de la otra persona de forma sistemática, hasta hacerle cuestionar su propio juicio. Algunos comportamientos característicos del gaslighting incluyen negar haber dicho o hecho cosas que la víctima recuerda claramente, minimizar o ridiculizar los sentimientos de la otra persona, manipular conversaciones y generar confusión constante sobre lo que es real y lo que no.

Con el tiempo, la víctima puede empezar a dudar de sus propios recuerdos y emociones, quedando atrapada en un círculo de inseguridad emocional cada vez más profundo. Los psicólogos advierten que el gaslighting es una herramienta de control emocional de consecuencias graves, ya que al alterar la percepción de la realidad, afecta directamente a la memoria y a los recuerdos.

Este tipo de manipulación puede provocar en la persona que lo sufre desgaste de la autoestima, ansiedad, problemas de concentración y toma de decisiones, dependencia emocional e inseguridad constante. El gaslighting muchas veces comienza con pequeñas distorsiones que, acumuladas, terminan por erosionar la confianza en uno mismo. Salir de una dinámica de gaslighting no es sencillo, requiere un proceso de reconstrucción de la autoestima y del propio criterio emocional.

Los efectos de esta técnica de manipulación terminan dañando la salud mental y emocional de quien la padece. Reconocerla es la clave principal para construir relaciones basadas en el respeto, la empatía y la honestidad emocional.