La planta que ahuyenta a los mosquitos y deja buen olor en casa: con propiedades repelentes y fácil de cuidar

Con la subida de temperaturas, también llegan esos visitantes que nadie quiere en casa: los mosquitos. Aunque hay productos para combatirlos, muchas veces resultan agresivos, incómodos o poco eficaces. La buena noticia es que la solución puede estar en una simple maceta, y además, decorar con estilo: hablamos de la citronela.

Esta planta de aroma cítrico es una de las grandes aliadas del verano. No solo embellece cualquier rincón de casa, sino que actúa como un repelente natural contra los mosquitos, gracias a los aceites esenciales presentes en sus hojas. Y sí, su fragancia a limón no solo refresca, también disuade a los insectos voladores de acercarse.

Ideal para terrazas, balcones y ventanas

La citronela es una planta robusta que crece bien tanto en suelo como en maceta. Puede alcanzar hasta un metro y medio de altura y su presencia es muy vistosa, especialmente cuando se combina con otras aromáticas como lavanda o albahaca. Si tienes un balcón o una ventana soleada, es el lugar perfecto para ella.

Solo necesita mucha luz natural, riegos moderados y evitar el exceso de agua. Nada de complicaciones. Si la tierra está seca al tacto, es momento de regar. Si no, mejor esperar. Su mantenimiento es sencillo y su recompensa, enorme.

A diferencia de los ambientadores artificiales o los sprays antiinsectos, la citronela ofrece una alternativa ecológica y segura. No necesita enchufes, no deja residuos en el aire y puedes tenerla cerca sin preocupaciones, incluso si convives con niños o mascotas.

Otra ventaja es que no solo repele mosquitos, también ayuda a crear un ambiente relajante, gracias a su aroma fresco y limpio. Muchas personas la usan incluso como parte de su rutina de bienestar en casa, ya sea colocando una maceta cerca de la cama o añadiendo su aceite esencial a un difusor.

Además de su efecto antimosquitos, la citronela tiene propiedades antimicrobianas y calmantes. Se utiliza en cosmética natural, en velas, e incluso en productos de limpieza caseros. Y si tienes huerto o jardín, puede ayudarte también a mantener alejadas otras plagas sin necesidad de recurrir a productos agresivos. Su sola presencia crea una barrera vegetal que mejora el equilibrio natural del entorno.