Adiós a las manchas negras en las sandalias: el sencillo truco para eliminar las huellas y que queden como nuevas

Las sandalias son sinónimo de verano, pero también del rastro que dejan los pies tras semanas de uso, calor y sudor. Manchas oscuras, marcas de pisadas y mal olor son un clásico de agosto, justo cuando toca guardar el calzado hasta el próximo verano. La buena noticia es que no hace falta decirles adiós ni resignarse a llevarlas sucias: existen trucos de limpieza caseros que las devuelven a la vida en cuestión de minutos.

Durante las últimas semanas, tanto expertas en limpieza como creadoras de contenido han compartido sus métodos favoritos para rescatar sandalias ennegrecidas. Uno de los más comentados lo protagoniza la tiktoker Yoli, que mostró el antes y el después de unas sandalias claramente “reventadas de andar todo el verano”.

¿La clave? El quitagrasas. Según explica, basta con aplicar una pequeña cantidad del producto directamente sobre las zonas más sucias de la plantilla, dejar actuar unos segundos y “frotar como si no hubiera un mañana” con una bayeta humedecida. El resultado, según sus propias palabras, es espectacular: “niqueladas a como estaban”.

El quitagrasas, además de limpiar, elimina residuos grasos, bacterias y olores acumulados en las suelas. Este tipo de productos está formulado para disolver suciedad difícil, como la que se acumula en los fogones o en los azulejos de la cocina, y por eso funciona tan bien también sobre el calzado, especialmente si las plantillas son de materiales lavables como plástico, goma o corcho. Eso sí, siempre es recomendable hacer una prueba en una zona poco visible antes de aplicarlo en todo el zapato, por si acaso.

Otra alternativa muy valorada en redes y por algunos medios especializados es el uso del bicarbonato de sodio. Este polvo blanco, que casi todos tenemos en casa, puede aplicarse tras un lavado rápido con agua caliente. Una vez espolvoreado sobre las zonas más oscuras, se deja actuar unos cinco minutos y luego se frota con un cepillo de dientes viejo. Después, basta con enjuagar con agua tibia y dejar secar al aire. El bicarbonato no solo limpia sino que también neutraliza olores, lo que lo convierte en un aliado ideal para quienes buscan una solución más natural o sin químicos.

Ambas opciones, el quitagrasas y el bicarbonato, permiten recuperar el aspecto original de las sandalias sin necesidad de tirarlas ni esconderlas al fondo del armario. Ahora que el verano sigue su curso, o si estás pensando en alargar su uso unas semanas más, estos trucos rápidos y eficaces te permitirán lucirlas con orgullo, como si acabaran de salir de la tienda.