Este es el error más común al limpiar la campana de cocina (y cómo solucionarlo)

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• El sencillo truco para limpiar la grasa de la campana extractora

La campana extractora es uno de los electrodomésticos más olvidados en la rutina de limpieza pese a ser también uno de los que más grasa acumula. Su función de absorber vapores y olores hace que, con el tiempo, los filtros se saturen y el rendimiento disminuya. Pero, según las expertas en limpieza, hay un error que casi todo el mundo comete al intentar limpiarla y que puede empeorar la situación: usar productos demasiado agresivos o abrasivos.

Muchas personas recurren a desengrasantes potentes o estropajos metálicos para eliminar la grasa incrustada, sin saber que estas prácticas pueden dañar el acabado del acero inoxidable y reducir la vida útil del aparato. Además, los productos químicos muy concentrados suelen dejar residuos que, al calentarse, desprenden olores desagradables y pueden afectar al funcionamiento del filtro.

También es un error limpiar solo la parte exterior y olvidarse de los filtros interiores, donde se acumula la mayor parte de la suciedad. Esto no solo afecta al aspecto del electrodoméstico, sino también a su eficacia: si los filtros están obstruidos, la campana no extrae correctamente y puede generar más olor en la cocina.

Por ello, la mejor solución es utilizar una mezcla casera de agua caliente, vinagre blanco y unas gotas de jabón neutro. Este remedio natural disuelve la grasa sin dañar los materiales y deja la campana limpia y sin residuos. Basta con aplicar la solución con un paño de microfibra, dejar actuar unos minutos y retirar con otro paño húmedo. Para los filtros, lo ideal es sumergirlos durante 15 minutos en esta mezcla y aclararlos con agua caliente.

En caso de que los filtros estén muy sucios, se puede añadir una cucharada de bicarbonato de sodio al agua para potenciar el efecto desengrasante. Una vez limpios, deben secarse completamente antes de volver a colocarlos, ya que la humedad puede reducir la eficacia del sistema de extracción.

Los expertos recomiendan limpiar los filtros de la campana cada dos o tres semanas si se cocina con frecuencia. Además, pasar un paño húmedo por la superficie tras cada uso ayuda a evitar que la grasa se acumule. De esta manera, se prolonga la vida útil del electrodoméstico y se mantiene un ambiente más fresco y saludable en la cocina.

En definitiva, el error más común al limpiar la campana extractora no es la falta de limpieza, sino hacerlo de la forma equivocada. Con productos suaves, constancia y una técnica correcta, es posible mantenerla impecable y funcionando como el primer día.