Según la psicología, adoptar estos 7 hábitos puede cambiar tu forma de vivir y trabajar

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En una época marcada por el exceso de estímulos, la multitarea y la falta de tiempo, ser efectivo se ha convertido en una de las habilidades más valiosas. No se trata solo de hacer más cosas en menos tiempo, sino de encontrar un equilibrio entre productividad, bienestar y propósito. La verdadera eficacia, más que una cuestión de agenda, es una forma de entender la vida.

El psicólogo Jonathan García-Allen, en un artículo publicado en 'Psicología y Mente', explica que las personas realmente efectivas comparten una serie de hábitos que les permiten mantener el foco, gestionar mejor su energía y tomar decisiones con claridad. Inspirado en el clásico de Stephen Covey, 'Los siete hábitos de la gente altamente efectiva', el experto los adapta al contexto actual, donde la salud mental y la inteligencia emocional son tan importantes como los resultados.

El primero de estos hábitos es ser proactivo, es decir, asumir la responsabilidad de las propias decisiones y actuar en lugar de esperar a que las circunstancias cambien. También destaca la necesidad de empezar con un fin en mente, un principio que invita a tener una visión clara del futuro y a establecer objetivos realistas, específicos y alcanzables.

Otro de los puntos clave es poner primero lo primero, o lo que es lo mismo, aprender a priorizar. Distinguir entre lo urgente y lo importante permite trabajar con mayor serenidad y evitar la sensación de estar siempre apagando fuegos. En el ámbito de las relaciones personales, García-Allen resalta la importancia de pensar en ganar/ganar, una actitud basada en la cooperación y el beneficio mutuo.

La comunicación también juega un papel esencial. El psicólogo recuerda que comprender antes de ser comprendido es una de las claves de la empatía y la convivencia. Escuchar activamente y gestionar las emociones con respeto mejora tanto la vida laboral como la personal.

Por último, menciona dos hábitos que completan esta lista: sinergizar, o aprovechar el talento colectivo para obtener resultados más creativos, y afilar la sierra, que implica cuidar cuerpo y mente mediante el descanso, la formación y el autocuidado. Estos siete principios, explica García-Allen, son una guía para alcanzar un tipo de éxito más sostenible: uno que combina eficacia con equilibrio, y resultados con bienestar.