Así es Enric Auquer: una complicada adolescencia, dos hijos y su relación con Macarena García

El actor catalán, nacido el 10 de marzo de 1988 en Girona, nunca había pensado en dedicarse a la interpretación, hasta que con 20 años su madre le convenció para que probara suerte en una escuela de Barcelona. Ahora, va camino de conseguir el que podría ser su segundo premio Goya.

Enric y Macarena García, que se caracterizan por una vida discreta fuera de la pantalla, lo han comenzado siendo fotografiados en el centro de Madrid comiéndose a besos. Una relación que llega después de los ocho años de noviazgo con Leiva por parte de la intérprete.

“Fue la primera vez que sentí que se me daba bien algo. La interpretación me sanó muchísimo”, confesaba en una entrevista a ‘El Periódico de Extremadura’. El actor, que ha reconocido en varias ocasiones que sufrió fracaso escolar y tuvo una adolescencia complicada, encontró en ella su pasión.

“De pequeño estaba diagnosticado de TDAH, era disléxico, tenía ansiedad, hiperactividad, era un desastre escolar, no podía estar quieto”, aseguraba en el mismo medio. Asimismo, reconocía que no lo pasó bien durante sus años de estudiante: “No me gustaba nada ir a la escuela, iba con un cojín y me ponía a dormir. Era una frustración y un drama”, aseguraba en una entrevista en TV3. “Todavía tengo sueños en que estoy en el instituto y me levanto gritando de la angustia”, añadía.

Tiene dos hijos: Carmela, que nació en 2016, fruto de la relación que mantuvo con la actriz Marta Aguilar, y Antonio, que nació a finales de 2021, y al que tuvo con su actual pareja, la cantante Adela Oller. Ambos son muy discretos en lo que se refiere a su vida privada, aunque la cantante publica, de cuando en cuando, alguna imagen en la que aparece el actor.

A Enric Auquer no le gustan las redes sociales, como explicaba en ‘XL Semanal’: “Las usé al principio unos meses y las abandoné porque no era sano”, confesaba. Se muestra muy crítico con ellas: “No voy a participar en ese mundo de mentiras y exhibicionismo. Es un relato que no forma parte de la verdad”, considera. Confiesa que prefiere “estar con mis hijos que perder el tiempo intentando gestionar tu ego en una pantalla”, y que cuando dejó de utilizarlas, “fue como superar una enfermedad, una adicción absurda que te desconecta de lo importante”.

En el mismo medio reconocía que siempre hace lo mismo nada más despertarse: “Queda muy mal decirlo, pero no debo de ser el único. Me levanto, voy al baño con algo para leer y me siento en el retrete con mi café con leche y un pitillo”.

Saltó a la fama tras su interpretación en la película ‘Quien a hierro mata’, por la que obtuvo el premio Goya al mejor actor revelación en 2020, y pese a estar muy bien considerado en el cine, el actor prefiere el teatro: “El teatro es mi vida, y el cine, a veces, puede ser muy aburrido. El teatro es trepidante porque es directo”, afirma.