Vanessa Romero no tiene tiempo para pasar por el altar

Cuando Vanesa Romero, la rubia más guapa de la serie 'Aquí no hay quien viva' -ahora en 'La que se avecina'- se presentó a Miss España (Ver vídeo de su paso por el certamen), lo hizo con ilusión, con las cosas claras, pero aún sin saber que le depararía el futuro. Ahora, doce años después a sus treinta y uno, es una mujer madura que empieza a recoger el fruto de años de trabajo.

Esta misma semana comienza a rodar la nueva temporada de la serie, en la que interpreta a una joven consultora inmobiliaria de la que todo el mundo intenta aprovecharse. Pero su personaje, igual que ella, ha ido cambiando a lo largo de todos estos años también cambiará. Para empezar, estrena nuevo look.

De belleza de estilo nórdico con cabello rubio y ojos claros, a castaña, que para alegría de unos y envidia de otras, también le queda de maravilla. “En enero empiezo rodar una película, una de época que se llama Entre dos reinos, y de ahí lo del pelo, porque en la época no había mechas de pelo y he tenido que cambiar”, comentaba a Vanitatis la guapa alicantina.

Dice que ha preferido hacerlo ahora, aunque aún queden unos meses. “No quería hacer el cambio de pelo a mitad de temporada” afirmaba. Dice que hasta para su trabajo televisivo le ha venido bien el cambio de imagen, porque, según adelanta, su personaje “también va a experimentar cambios. Va a desmelenarse un poco y se va a volver más agresiva”.

Ese es sólo uno de los proyectos que la mantienen ocupada. Acaba de finalizar el rodaje de una película en clave de comedia con Mónica Cruz, Anabel Alonso, que acaba de finalizar y que se estrena el próximo año, y dice que no ha tenido tiempo de preparar su boda con Alberto Caballero, sobrino de José Luis Moreno de quien asegura estar “muy enamorada” y de quien dice que es “un buen compañero”. “Nos hemos cambiado de casa aprovechando el parón de verano y ya es bastante”, asegura la guapa actriz.

Se confiesa “una persona positiva” y afirma que sí, que está “muy enamorada”. Pero reconoce que con los años se ha vuelto “más práctica en ese sentido”. Por eso opina que si mantiene una relación con alguien “es porque esa persona te aporta algo en tu vida”, y si la relación “va bien, genial y si va mal, fuera. Ya está, se pasa mal, porque se pasa mal, pero otra cosa vendrá”, y asegura que “hay que ser feliz en la vida”.

Con ese espíritu continúa día a día trabajando, ajena a la existencia de envidias. Dice que no piensa en ellas y que se dedica a hacer lo suyo, y que lo que hace ahora “son proyectos de hace tiempo que se van poniendo en marcha” mientras sonríe con felicidad porque se sabe una persona afortunada. “Estoy disfrutando al máximo de lo que me dan, de lo que me ofrecen”, sentencia. Algo que seguirá haciendo siempre que le dejen con la misma ilusión que cuando pasó ante el jurado de Miss España, aunque de aquello haga ya muchos años.