Victoria de Suecia se suma al duelo nacional: su emotiva participación en el homenaje a las víctimas del tiroteo en Örebro

Los príncipes Victoria y Daniel de Suecia han acudido este domingo 9 de febrero a la iglesia de Längbro en Örebro para participar en una misa solemne en memoria de las víctimas del devastador tiroteo ocurrido el pasado martes en la escuela Risbergska. El trágico suceso, que se saldó con la muerte de 11 personas, ha sido catalogado como el más mortífero en la historia del país escandinavo, dejando una profunda conmoción en la sociedad sueca.

Durante el servicio, se ha podido ver a la pareja real con un semblante serio, muy acorde con el ambiente lúgubre que se respiraba. El coro y los músicos de la congregación interpretaron piezas solemnes que acompañaron la predicación del arzobispo Martin Modéus. La ceremonia fue retransmitida en directo a través de SVT Play y Radio Play de Suecia, permitiendo que todo el país pudiera unirse en el luto y la reflexión.

La ceremonia religiosa, oficiada por el arzobispo y dirigida por la pastora Sonya Wallentin, ha contado también con la presencia de diversas personalidades, entre ellas el obispo Johan Dalman y la ministra de Finanzas, Elisabeth Svantesson. Además de los representantes eclesiásticos y gubernamentales, numerosos feligreses y ciudadanos de Örebro acudieron al templo para rendir homenaje a las víctimas y mostrar su solidaridad con sus familias.

Tras la misa, los príncipes se desplazaron hasta el lugar conmemorativo improvisado a las afueras de la escuela Risbergska. Allí, en un gesto de respeto y apoyo, depositaron flores junto con los clérigos y sumándose al tributo que numerosos ciudadanos han rendido desde que se conoció la magnitud del ataque.

Las autoridades suecas continúan investigando lo sucedido, calificando el ataque como “un intento de asesinato, un incendio provocado y un delito de armas con agravantes”. El sospechoso, que actuó en solitario, fue hallado sin vida por la policía y no contaba con antecedentes ni vínculos con bandas criminales o grupos terroristas, según informó la agencia Reuters.

La visita de Victoria de Suecia y su esposo a Örebro se produce en un momento de contrastes para la familia real. Mientras el país llora la tragedia, la Corona también celebra la reciente llegada de un nuevo miembro, ya que la princesa Sofía dio a luz a una niña el pasado viernes. Está previsto que mañana tenga lugar una misa en la que se revelará el nombre de la pequeña, manteniendo la expectación entre los suecos.

El miércoles, los reyes Carlos XVI Gustavo y Silvia también se desplazaron a Örebro para rendir homenaje a las víctimas. Visitaron el recinto escolar de Västhaga y depositaron flores en el lugar antes de participar en un servicio conmemorativo en la Iglesia de San Nicolás, mientras las banderas ondeaban a media asta en señal de duelo.