Haz trampas para aprender idiomas: métodos para hablar otras lenguas que nadie te había explicado

Estudiaste en el colegio, tus padres te apuntaron a una academia, incluso te enviaron a Inglaterra un verano donde solo te pegaste fiestas con españoles, ves series subtituladas… pero no pasas del chapurreo del inglés o de cualquier otra lengua. Y ahora mismo volver a hincar los codos y que te hablen del genitivo sajón por enésima vez te resulta una pesadilla que hace que Freddy Krugger parezca una hermanita de la caridad. Bien, pues vamos a ver si hay algún atajo, alguna trampilla que te permita arrancarte en el idioma que quieras rápidamente.

Método Michael Thomas

Este judío polaco que huyó por los pelos del holocausto nazi se estableció en Hollywood y acabó siendo el reputado profesor de cualquier lengua para las 'celebrities' (como Grace Nelly, Alfred Hitchcock o Woody Allen). Con 90 años seguía dando clases y por tres sesiones cobraba unos 24.000 euros, con lo que se supone que su método debía funcionar. Pero para los que no podían permitirse tal dispendio, preparó una serie de CD que seguían sus enseñanzas.

Thomas no creía que nadie tuviera una habilidad innata para aprender idiomas, sino que bastaba con incorporarlo de forma natural, como hacen los niños. Por ello, empezaba con estructuras muy simples que poco a poco se iban volviendo más complejas. Actualmente se pueden aprender 12 lenguas, las que él hablaba, siguiendo este método. ¿Inconvenientes? Pues que no hay cursos para aprender inglés (en casa del herrero…) y que no se aprende a escribir, solo a entender y hablar.

Método Pimsleur

Tiene algunos puntos en común con el anterior y algunas diferencias. Paul Pimsleur era un lingüista estadounidense. El curso también se imparte en CD o en archivos mp3. No es tan pasivo como el anterior, ya que el estudiante tiene que repetir algunas palabras. En general, las lecciones empiezan con un diálogo en inglés del que se tendrán que repetir algunos trozos o sílabas. Según el creador, es más fácil retener a intérvalos graduados y de una forma orgánica. Siguiendo este método se supone que en unos diez días podrías empezar a hablar el idioma. Se aconseja que si no tienes ni idea del mismo, no hagas más de una clase al día, pero que si ya dominas un poco la lengua, te marques el ritmo que mejor te vaya. Lo mejor es que cuenta con nada más y nada menos que 50 idiomas. Evidentemente, el que tiene más acogida es el inglés y los que lo han probado hablan maravillas.

Duolingo

Existen diferentes aplicaciones para móvil que permiten estudiar idiomas (Aprende 50 idiomas, Babbel, Bossu…), pero sin duda la más espectacular y completa es Duolingo. Es la única que es completamente gratuita (muchas lo son hasta acceder a cierto nivel) porque su creador, Luis Von Ahm, estaba harto de que las personas con una economía baja no pudieran acceder al estudio de idiomas. Mediante un sistema de escucha y repetición garantiza que 34 horas siguiendo este método equivalen a un semestre en una academia. Con 100 se adquiriría un nivel intermedio.

Hipnoaprendizaje

Es sin duda el más controvertido: ¿de verdad se puede aprender un idioma por hipnosis? A todos nos gustaría que la respuesta fuera afirmativa, pues sería como vivir en Matrix y que te colocaran un 'pen drive' para aprender lo que quisieras sin ningún esfuerzo. El inconveniente es que estos métodos suelen ser caros. El más conocido es el CEYDI, tiene tres niveles y cada uno cuesta 1.800 euros. Prometen que 40 horas (que es lo que dura cada nivel y se realizan en cursos presenciales de cuatro a cinco días) equivale a 5 años de estudio. También se pueden encontrar otro métodos que utilizan la hipnosis por CD. Otra aplicación de esta técnica es hacer una sesión antes de una clase para motivar al alumno y maximizar su rendimiento.

8Belts

Por último, mencionar un método que está dando mucho que hablar y que solo sirve para dos idiomas: inglés y chino. Un gallego, Anxo Pérez, desarrolló este método que promete hablar con fluidez la lengua en tan solo ocho meses. La clave está en que garantizan la asimilación de los contenidos. Incluye conversaciones, pruebas auditivas y diferentes niveles. El primer mes cuesta 600 euros y aseguran que transcurrido este periodo ya podrás defenderte en el idioma.