Antonio Carmona se compra casa y barquito en la ciudad de Miami

Antonio Carmona ha puesto tierra de por medio y se ha instalado de manera definitiva en Miami, donde ha montado su cuartel general, desde el que compone para otros artistas y continúa con sus quehaceres en el campo de la producción musical. El excomponente de Ketama está triunfando en tierras americanas, donde el sello Carmona viene acompañado de la palabra éxito.

Lo que comenzó como pequeñas visitas al continente americano, ha terminado por convertirse en su nuevo hogar y en una nueva manera de trabajar. Alejado de los escenarios, Carmona vive por y para la música desde una esfera diferente. Encerrado en la nueva casa que se ha comprado, se ha hecho un hueco importante componiendo temas. Una decisión que ha afectado a toda la familia, ya que sus dos hijas, Marina y Lucía, se han trasladado junto a su padre a Miami donde continúan sus estudios, mientras su mujer, Mariola Orellana, conocida representante de un nutrido grupo de artistas, vive a caballo entre el continente americano y España, donde continúa con su trabajo junto a Rosario Flores, con quien hace unos días estuvo grabando el videoclip de su último disco.

Según ha podido confirmar Vanitatis de fuentes próximas, el matrimonio ha puesto en alquiler el chalet familiar que tenían en una lujosa zona de la capital, ya que por el momento los planes pasan por permanecer durante una larga temporada en EEUU. No será hasta finales de junio cuando toda la familia vuelva a España para disfrutar como cada año de las playas de Cádiz, aunque sólo durante el verano.

Navegando con Colate

Pero no todo es trabajo en la nueva vida de Carmona. Su amor por el mar le ha llevado a comprarse un pequeño barquito en el que navega con frecuencia en compañía de sus amigos, como Nicolás Vallejo-Nágera, con quien también se le ha visto disfrutar de la vida nocturna de Miami.

Fue precisamente en Miami donde el excomponente de Ketama se refugió tras la ruptura temporal con Mariola a principios del año 2011. En aquellos días Antonio contaba con el apoyo de un nutrido grupo de amigos entre los que se encontraban Alejandro Sanz, Eva Longoria y el propio Colate. Varios meses después el matrimonio se daba una segunda oportunidad y la familia al completo se unía para celebrar el dieciocho cumpleaños de su hija Marina. Desde entonces, y a pesar de los miles de kilómetros que les separan, Carmona y Orellana son un matrimonio estable capaz de compaginar sus agendas profesionales y personales.