La princesa Leonor comienza su nueva aventura: así han sido sus minutos antes de zarpar en el Juan Sebastián de Elcano

Este sábado es el día, la princesa Leonor se embarca en una aventura que su padre ya conoce bien, pues realizó el mismo viaje hace 40 años. La heredera al trono ya se encuentra en formación en la cubierta del buque escuela Juan Sebastián de Elcano, la que será su casa durante los próximos cinco meses.

La mañana en Cádiz ha comenzado temprano con un ambiente de expectación y solemnidad. A las 09.00 horas, la royal y sus 74 compañeros guardiamarinas, entre ellos ocho mujeres, han participado en una misa en la iglesia de Santo Domingo. Este acto religioso, tradicional en las despedidas del barco, incluyó la presencia de la imagen de Nuestra Señora del Rosario, conocida como La Galeona, considerada la protectora de los navegantes. Durante la ceremonia, los curiosos que se acercaron no escatimaron en muestras de afecto hacia la heredera al trono con gritos de “¡Guapa!” al reconocerla.

Tras la misa, los guardiamarinas han formado para trasladar la imagen en procesión. Desde el templo santo, recorrieron las calles hasta llegar al muelle, donde ya les esperaban familiares, autoridades y ciudadanos emocionados por presenciar este momento histórico. Allí, La Galeona ha sido embarcada en el buque, marcando un paso crucial antes de la partida.

Leonor, que ya ha subido a bordo del Elcano, espera pacientemente la llegada de sus padres, los reyes Felipe VI y Letizia, que se unirán al acto junto a la ministra de Defensa, Margarita Robles. La llegada de los monarcas al puerto gaditano se producirá alrededor de las 11.00 horas, recibiendo honores protocolarios antes de subir al barco. En el interior del buque, la familia real compartirá un momento privado para poder despedirse antes de trasladarse al barco vigía, desde donde dirán adiós a su primogénita desde el mar.

Un uniforme impecable y solemne

Para esta ocasión especial, Leonor ha lucido el uniforme de guardiamarina, con el que ya se la ha visto en días anteriores. El conjunto consiste en una chaqueta y pantalón azul marino, acompañado por una gorra blanca, que reflejan la tradición y la formalidad de su formación naval en la Escuela de Marín. La princesa optó nuevamente por un moño trenzado de baja altura, un peinado que ha mantenido en sus recientes apariciones públicas, destacando por su elegancia y sobriedad.

En sus primeras horas como parte de la tripulación, Leonor se ha mostrado serena y centrada, cumpliendo con los protocolos establecidos. La expectación por verla embarcar se vivió en el muelle, donde ciudadanos y familiares aguardaban, pero también en la plaza de San Juan de Dios, donde los gaditanos se congregaron para ser testigos de la procesión de los guardiamarinas y La Galeona.

El Juan Sebastián de Elcano zarpa desde Cádiz con destino inicial a Gijón, dando inicio a un recorrido que llevará a la tripulación a navegar por América durante los próximos seis meses. Entre las escalas destacan ciudades emblemáticas como Nueva York y puertos en Brasil, con el regreso programado para el 21 de julio. Este viaje supone un paso significativo en la formación de la heredera al trono, que sigue los pasos de su padre, que también vivió esta experiencia durante su juventud.

La Princesa Leonor comienza esta aventura con el respaldo y la admiración de sus compañeros, superiores y ciudadanos. Su participación en esta travesía representa una etapa de aprendizaje profesional y un símbolo de compromiso con su formación y su futuro papel como Reina de España.