Demi method: el corrector con el que se borran las ojeras más oscuras, según TikTok

Más complicado que dar con la base de maquillaje perfecta es conseguir un corrector que se adapte a tu tono de piel, cuya textura sea natural, que cubra, no apelmace y no deje un acabado ‘cakey’... Muchas peticiones para un cosmético que, además, se gasta con solo mirarlo.

El consejo del maquillador siempre es no dejarse guiar por modas ni tendencias y prestar atención a lo que nuestra piel pide y lo que un experto evalúa. Pero ¿qué ocurre tras comprar el concealer salvavidas?

Puede que el verdadero issue del mundo de los correctores sea, en realidad, la forma de aplicarlo. Según la corriente, podíamos dibujar un triángulo invertido bajo los ojos, depositar tan solo un punto bajo el lagrimal y otro al final del ojo, o incluso superponer varias capas para conseguir una capa pegajosa si se tenía la piel grasa -el sticky method-.

El nuevo método de moda es el 'demi method', un truco habitual entre maquilladores que se apoya en la rueda de colores y en una considerable reducción de la cantidad de producto utilizada. El resultado es una difuminación de las ojeras de la forma, quizá, más natural hasta la fecha.

Cara Brook, la maquilladora responsable de viralizar en TikTok este truco de maquillaje, teoriza sobre la importancia de dar con los colores exactos de los correctores para conseguir el verdadero efecto del demi method.

La idea no es cubrir las zonas oscuras o rojizas del área de las ojeras sino neutralizarlas, para lo que el truco de la maquilladora es invertir el color. Sobre las zonas oscuras, se aplica corrector claro, sobre las zonas más oscuras, se aplica un color más claro.

Esta inversión cromática se traduce en TikTok como ojeras maquilladas de tal modo que, inmediatamente, bajo el ojo se aplica un color más claro -esta zona tiende a ser más oscura- y en las zonas próximas al pómulo un color más oscuro.

Habitualmente, la parte alta del pómulo se aprecia más clara, más luminosa. Lo que hace el demi method es algo así como igualar el tono, oscureciendo una zona y aclarando otra, de tal modo que no se aprecia ese efecto de ojera. No es la primera vez que vemos este juego de luces pues el truco de aplicar corrector rosa o rubor rosa sobre las ojeras también ha tenido su momento de gloria en redes sociales.

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Bajo los ojos se suele concentrar cierta oscuridad, lo que resalta aún más al contraste con la parte alta de los pómulos, resplandecientes en un tono muy claro. El demi method busca equilibrarlos. Para conseguirlo, la teoría del color también entra en juego; por ejemplo, las ojeras azuladas deberían tener su toque sutil con corrector anaranjado, siguiendo la rueda cromática de colores opuestos y complementarios.

Lo más fácil es apostar por correctores clásicos, sin entrar en el juego de los colores; es decir, el clásico combo base de verano/base invierno, aplicado al concealer, un tono más claro y otro más oscuro.

Para lograrlo, es fundamental tener a mano dos tonos, o incluso más si eres muy pro, de corrector para así cubrir tanto las zonas claras como las oscuras. La otra herramienta imprescindible es el pincel fino. Y aquí entra en acción el truco con el que se ahorra maquillaje.

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El clásico pincel fino con el que se puede realizar un delineado o aplicar algún detalle es la herramienta con la que aplicar el corrector, única y exclusivamente en las zonas en las que sea necesario.

Es decir, no estamos ante una zona grande que cubrir, creando ese típico efecto parche. El demi method se centra en líneas finas, en imperfecciones pequeñas, en toques precisos que consiguen cubrir imperfecciones de forma muy natural.

Otra forma de aplicar las correcciones concretas, y de paso hacerlo de una forma difuminada y más discreta, es con pinceles de difuminar sombras de ojos, truco especialmente extendido cuando las correcciones se realizan con maquillaje en polvo.

Sin embargo, la recomendación más habitual es la de recurrir a correctores en crema. Su fácil aplicación y difuminación contribuyen a un resultado más difuso y natural, prácticamente imperceptible.