La casa de Nacho Palau en Valencia: piscina, huerto y con mucha historia

Desde que Nacho Palau y Miguel Bosé decidieran poner fin a su relación en 2018, el escultor junto a sus dos hijos, Ivo y Telmo, decidió volver a sus orígenes e instalarse en la casa donde vivía su madre situada en el municipio valenciano de Chelva. Una localidad que forma parte de la conocida como 'Ruta del Agua' y que es una de las más importantes de la comarca.

Cabe recordar que el proceso judicial por la custodia de los hijos de la pareja determinó que cada uno de los progenitores tendría la custodia de sus dos hijos genéticos correspondientes, ya que los niños habían sido fruto de gestaciones subrogadas diferentes. Es un proceso que sigue a día de hoy en los tribunales, dada la reciente demanda que presentó el escultor contra el cantante.

La casa y los terrenos en los que Nacho vive con sus dos hijos fueron adquiridos por él hace años para que su madre viviera allí. La casa se encuentra en plena naturaleza, ideal para disfrutar de la vida al aire libre, y cuenta con jardín, porche, huerto, piscina y unas espectaculares vistas a la montaña. Nacho Palau, que siempre ha reconocido sentirse muy vinculado a la zona, intenta que sus hijos también sientan este espacio como algo propio y que forjen un vínculo con él.

A través de sus publicaciones en su cuenta de Instagram (@nachopalau), el escultor muestra la piscina y sus espectaculares vistas a la montaña, espacio que aprovecha para practicar yoga y meditar, y también comparte fotos de algunos de los momentos con familia y amigos en el jardín disfrutando de una tradicional comida al sol.

La casa cuenta con una planta, está edificada en piedra y decorada siguiendo el estilo tradicional de la zona. Aunque el escultor no suele compartir el interior de la vivienda en las fotos que postea, sí que se ha podido observar que la cocina está decorada en granito y color tierra y que posee una vajilla tradicional, acorde con la línea de la casa.

Respecto al dormitorio del escultor, este cuenta con dos mesillas de roble, una cama con cabecero sobre la cual tiene un reloj dorado y lamparillas de noche colgadas de las paredes que son de color blanco como el resto de la estancia.

En definitiva, un hogar en plena naturaleza, sencillo, sin excesivos lujos e ideal para la desconexión en el que Nacho Palau lleva a cabo la crianza de sus dos hijos con la esperanza de que puedan reunirse con sus dos hermanos pronto.