Cayetano Rivera presenta una denuncia por detención ilegal contra los agentes que lo detuvieron en Madrid

Cayetano Rivera, tal y como había prometido públicamente cuando ocurrieron los hechos, ha presentado a través de su abogado una denuncia en los Juzgados de Instrucción de Plaza de Castilla en Madrid por un presunto delito de detención ilegal contra los agentes que le detuvieron la madrugada del pasado lunes 30 de junio en un conocido restaurante de comida rápida. El torero, en libertad con cargos, fue acusado de un delito de resistencia a la autoridad y desobediencia.

Tal y como informó a Vanitatis su abogado, Joaquín Moeckel, esta demanda es fundamentalmente para “poner en conocimiento de los juzgados de instrucción” cómo ocurrió la detención y que ellos diluciden si “sobrepasó los límites lógicos y legales o no”.

Para ello, en esta demanda solicitan formalmente también que se pidan las imágenes captadas por las cámaras de seguridad en el momento de los hechos. “Es precisamente una de las diligencias que nos interesa que se practiquen y que se solicitan en la denuncia presentada”, nos asegura Moeckel: “Es una prueba fundamental".

Tal y como había trascendido ya el día de los hechos, Cayetano Rivera había detenido la madrugada del lunes 30 de junio en un conocido restaurante de comida rápida ubicado en la calle Atocha de Madrid tras un altercado con los trabajadores del local y la policía. Tal y como pudo saber en aquel momento en exclusiva el programa ‘Y ahora Sonsoles’, el torero habría llegado al establecimiento de madrugada, en torno a las 3, y no respetó las normas del establecimiento y empezó a increpar a los trabajadores.

Ante esta actitud, eran los propios trabajadores los que decidían llamar a la policía. A la llegada de dos agentes, Cayetano Rivera siguió comportándose de la misma manera. El diestro increpó a uno de los agentes y se encaró al otro. Por esta misma razón los policías decidieron detenerlo y pasando la noche en el calabozo. Cayetano quedó en libertad con cargos sobre las 7 de la mañana acusado de un delito de resistencia a la autoridad y desobediencia.

Un par de días más tarde, el propio torero emitía un comunicado a través de las redes sociales: "Aunque las heridas físicas duelen, no es eso lo que más me duele. El verdadero dolor nace de la impotencia y la frustración de sentirme tratado como un delincuente o incluso un 'terrorista' por una discusión previa, en la que en ningún momento amenacé ni agredí a nadie (...) Tengo el derecho —y, desde mi sentir, el deber— de defenderme de lo que considero una profunda injusticia. No pretendo ser ejemplo de nada, porque no me considero quién para ello, pero al menos merezco ser escuchado con el mismo respeto que ofrezco".

Ahora, cuando se cumple un mes y un día de los hechos, y tras desaparecer de la vida pública cancelando incluso varias corridas de toros de su último año en activo antes de retirarse, Cayetano Rivera ha dado un paso al frente para clamar justicia por lo que él considera una acción policial desmedida.