Las inseguridades de Scarlett Johansson

Gorda, labios grandes, muy bajita, voz desagradable… Pese a ser una de las mujeres más deseadas del mundo, Scarlett Johansson tuvo una adolescencia muy dura. La joven actriz se sentía como un patito feo, aunque para alegría de sus seguidores se convirtió en un bello cisne. Así lo ha reconocido la protagonista de Lost in Translation durante una entrevista concedida a la revista Bliss.

Johansson tenía grandes complejos de juventud que le generaron graves inseguridades. “Siempre he tenido dudas sobre mi apariencia cuando era una adolescente. Tenía una voz muy profunda y los labios grandes. A la gente le gustaba reírse de mí y me sentía incómoda muchas veces”, ha confesado.

Para empezar, la actriz estaba sumamente preocupada porque su cara resultaba bastante ancha. Además, siempre se sentía gorda y muy bajita, lo que afectaba a su propia autoestima. Sin embargo, al crecer las cosas cambiaron y ahora la joven es una de las más admiradas del mundo del Hollywood por su belleza.

Como en la actualidad no tiene novio conocido, la joven también ha dado en Bliss alguna que otra pista para conquistar su corazón. Siente especial adoración por los artistas. Aunque valora el físico, lo más importante para ella es la confianza que le pueda generar una persona. Estos requisitos no los debió cumplir Josh Hartnett, su último novio conocido con el que rompió en noviembre y al que se relaciona con Penélope Cruz.