El Rey ha acudido esta mañana a la capilla ardiente instalada en la sede de la Fiscalía donde se encuentran los restos mortales del fallecido fiscal general del Estado José Manuel Maza para dar el pésame a su familia. Allí, ha permanecido cerca de media hora para presentar sus respetos al que fuera uno de los altos representantes de la Justicia española y para acompañar a sus allegados allí presentes.

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El primer de ellos, Mariano Rajoy, quien ha declarado que “además de ser un excelente jurista, era una persona recta, justa, equilibrada, sensata y conocedor de la realidad en que se movía". Y no ha sido el único. Soraya Sáenz de Santamaría, María Dolores de Cospedal, Rafael Catalá, Pedro Sánchez y Albert Rivera han sido algunos de los muchos que han desfilado por los jardines del edificio y que más tarde se han detenido frente al pool de medios que esperaban a la salida de la capilla ardiente.