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Las mejor y peor vestidas de la alfombra roja de los Premios Goya 2017

Una noche especial, muchos –pero muchos- aciertos y una alfombra roja de las más elegantes de la historia de los Goya. ¿Los colores triunfadores? Sin duda

Una de las más elegantes de la noche con su Atelier Versace, creado para ella en exclusiva, que la verdad es que le sienta como un guante. Otra dimensión. Puro Hollywood.

Sin duda, uno de los escotes ‘doblete’ de la noche, en el pecho y en la espalda. Este vestido de Pronovias le sienta como una segunda piel a Amaia. Un espectáculo.

Espectacular y de dorado, guapa y deslumbrante, vestida de Michael Kors.

Elegantísima y guapísima de Del Pozo por Josep Font, sin palabras. Todo un homenaje en su noche más espectacular a su modisto de cabecera y su amigo del alma.

Con el ‘corazón partío’, así nos deja este vestido de Antonio García: la parte superior es espectacular, pero la inferior, la verdad, resulta difícil para una alfombra roja.

Muy guapa con este vestido de Teresa Helbig: terciopelo en rosa palo y bolsillos con pedrería. Espectacular con la abertura lateral de la falda, la cintura marcada y los puños amplios.

La idea no está mal, pero el resultado no está a la altura. De Daniele Carlotta.

Como siempre –al menos, últimamente–, espectacular, en esta ocasión de Alberta Ferretti. La verdad es que de Macarena siempre se puede esperar un look perfecto. Y en esta ocasión, con este vestido de cuerpo transparente y pedrería, y la falda con volantes en cascada, también.

Lo sabemos, a Cristina le encanta epatar y esta noche no podía ser menos. Pero lo original, no siempre es acertado. Este vestido largo-corto de Emilio Salinas, lo mires por el lado que lo mires, no tiene solución.

El amarillo siempre es difícil, pero en este vestido es imposible y más para una alfombra roja. De Beatriz de la Cámara.

Desafiando a la superstición: de amarillo y haciéndose un Emma Watson de pantalón y falda de cola plisada. La actriz, de Alicia Rueda, está impresionante.

El dúo de falda y camisa siempre nos gusta, aunque Ana no esté del todo favorecida. La falda de satén en color amatista y la camisa de popelín con doble cuello y puños son de Ulises Mérida

Espectacular con su toque retro y las flores bordadas. Un maravilloso vestido de Georges Hobeika Couture con una espalda al aire y bordada única.

Muy elegante con este vestido blanco con capa de Juanjo Oliva.

Querida Cuca, estamos totalmente de acuerdo con tu reivindación ‘chalera’ de más personajes femeninos, pero el vestido..., la verdad es que no nos gusta.

No, no nos gusta este vestido con apliques de flores, la idea no está mal, pero el aire de madrina de boda no hay quien se lo quite…

Quizá demasiado atrevido, quizá demasiado batín-kimono, la verdad es que nos encantaría que nos encantara porque nos encanta Juanjo Oliva, pero no, no nos encanta.

Elegante y especial con su vestido blanco y uno de los escotes más atrevidos de la noche. Quizá demasiado. ¿Lo mejor? Los hombros. Espectaculares.

La verdad, somos fans de Teresa Helbig, pero en esta ocasión el vestido de volantes nos deja frías. ¡¡Nooooooo!!!

Lo sabemos, el corpiño se lleva, pero no te sienta… y el collar de perlas, tampoco. No hay opción.

Verde botella y nude, dos colores que, juntos, resultan tan apagados como este vestido de Rubén Hernández. 

Con un maravilloso vestido plisado y cinturón de flores, de Santos Costura. 

Un buen corte y unos drapeados en su sitio siempre son garantía de éxito y, en este caso, este vestido de Paule Ka también.

Como siempre, guapa, y vestida por uno de sus diseñadores preferidos, Stephane Rolland, de negro con ese detalle tan alta costura típico del modisto francés.

Guapa, elegante y de blanco, claro, gracias a Dior Haute Couture.

Ni el color ni el escote de este Lorenzo Caprile le sientan bien a Emma. Una pena, de verdad.

Elegante, guapa y muy favorecida con este diseño de Ulises Mérida con escote en uve y capelina.

Una de las pocas que esta noche ha confiado en Lorenzo Caprile. Guapa y una de las pocas que apostó por el azul.

Etéreo, vaporoso y elegante, como debe ser un Monique L’Huillier, sin sorpresas, estridencias ni riesgos. En ese sentido, un acierto. 

Una señora, la verdad, y lo sigue demostrando en cada alfombra roja que pisa.

Se nos vino arriba Paula con este vestido rojo de Jorge Vázquez, al límite, pero espectacular, la verdad.

Elegante y diferente. Se agradece, la verdad. Vestida por Jorge Acuña y muy guapa, aunque quizá algún toque de luz en su look sí que lo habríamos agradecido. 

De negro y con choker, riesgo cero, la verdad, pero el resultado es correcto, aunque aburrido.

La verdad, nos dejamos arrastrar porque es Gucci y porque es espectacular, porque Bárbara, la verdad es que favorecida no estás…, aunque quizá la culpa habría que echársela al maquillaje.

Porque siempre nos gusta ver a Silvia y vestida de Armani Privé, mucho más.

Una de las pocas que apostó por no enseñar piel con este Santos Costura que es, desde luego, todo un acierto.

Y el equipo blanco se lleva otro punto de partido a su cuenta con este precioso vestido que se eleva a otra dimensión gracias a los volantes en el hombro.

Guapa y, sobre todo, diferente, como le gusta a la actriz, gracias a este Alicia Rueda bordado

Vale, correcta, pero la verdad es que este Ana Locking con cortes asimétricos no nos vuelve locas.
 

Muy guapa, otra que se une al clan de los vestidos rojos con este vestido vaporoso, sencillo y a todo color.

Guapa, de blanco y con ese toque retro de la transparencia en el escote que siempre resulta elegante. Espectacular, no, correcto, sí. De Antonio García.

De blanco también, pero con un bonito esmoquin de Juan Pedro López y zapatos de Christian Louboutin.

De lo peorcito de la noche, un vestido muy Alaïa que no, no está a la altura de las circunstancias.

Elegante y con un espectacular escote cuajado de flores de pedrería, de Fernando Claro Costura.

Lo sabemos, la lencería es tendencia, pero, para una alfombra roja, la verdad es que no nos gusta, por mucho que sea de Stella McCartney.

Un 10 para Clara, con este maravilloso vestido de Elisabetta Franchi que le sienta a la perfección. De las mejores de la noche.

A las pelirrojas, el rojo no les suele sentar bien… pero, esta noche, Cristina es la excepción que confirma la regla. Radiante y guapísima con su vestido de Versace.

Otra actriz que se apunta al blanco con este maravilloso vestido de Pedro del Hierro, elegante, sobrio y con un precioso escote asimétrico.

Sí, ¡una más para el equipo rojo! Y, como todas las que se han apuntado a este color, está impresionante. El segundo escotazo de la noche y una de las más guapas, gracias a este vestido vaporoso y plisado con lazo a la espalda de Alberta Ferretti. De verdad, espectacular.

 

Una noche especial, muchos –pero muchos- aciertos y una alfombra roja de las más elegantes de la historia de los Goya. ¿Los colores triunfadores? Sin duda el blanco, tanto en vestidos como en algún esmoquin, el rojo para algunas de las más guapas de la noche y alguna que otra atrevida que ha apostado por el amarillo. Han arrasado los vestidos plisados, algún escote de vértigo y, sobre todo, eso que se suele llamar ‘un derroche de elegancia’.

Salvo honrosas excepciones, parece que queda claro que menos siempre es más. La gala arranca con un alfombra roja que ha superado todas las expectativas. ¡Que se levante el telón!

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