Al ritmo de los Grammy
Jennifer Hudson regresa poco a poco a la vida pública tras el asesinato de varios de sus familiares. Este domingo fue una de las invitadas a la 51ª edición de los Grammy en el Staples Center de Los Angeles.
Los componentes de Coldplay, ataviados con trajes parecidos a los que vestían los Beatles en la portada del disco Sgt. Pepper's Lonely Heart's Club Band, recogían el premio a la mejor canción del año, por Viva la Vida. Esa canción fue objeto de una demanda a cargo del guitarrista estadounidense Joe Satriani, por el supuesto plagio de "porciones sustanciales y originales" de su canción If I Could Fly. La banda británica, al recoger el Grammy y en alusión a esa polémica, se disculpó por "copiar" la vestimenta de la mítica banda de Liverpool.
La artista británica Adele, novata en estas lides, salió bien parada de los Grammy. En la imagen muestra sus dos premios a Mejor Artista Revelación y a Mejor Actuación Vocal Femenina en el género Pop por su interpretación en la canción Chasing Pavements.
Natalie Cole, acostumbrada al reconocimiento de su carrera, no pudo menos que emocionarse cuando recibió el galardón a Mejor Álbum Vocal en el género Pop Tradicional por su trabajo Still Unforgettable.
Maya Arulpragasam, más conocida como M.I.A., encarna a la nueva generación de estrellas del pop. La británica de origen ceilandés también asistió a la entrega de los Grammy en Los Angeles.
Katy Perry, que arrasa en las radiofórmulas con su single I Kissed a Girl, no quiso perderse la entrega de los Grammy, que se celebró en el Staples Center de Los Angeles.
Will.I.Am, componente de los Black Eyed Peas, pasó el año pasado a la historia tras componer un tema dedicado a Barack Obama. Este domingo no se ha llegado ningún galardón por esa canción, aunque sí por Be Ok, que le ha supuesto el Grammy a la Mejor Actuación en el género Urbano/Alternativo
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