El desafortunado comentario de Trump sobre Lady Di que salpica al príncipe Carlos

Está claro que la vida de Donald Trump podría sintetizarse con un título como 'Con él llegó el escándalo', una de las películas menores de la filmografía de Vincente Minnelli en la que Robert Mitchum daba vida a un millonario mujeriego. El mandato del presidente de Estados Unidos, al igual que su trayectoria de empresario, ha estado marcado por la polémica, así que cada una de sus visitas de Estado se está convirtiendo en una 'patata caliente' para quienes tienen que organizarlo o reunirse con él. Ahora el foco está puesto en el Reino Unido...

Para caldear el ambiente, ante su visita que durará tres días a contar desde el 3 de junio, se han recuperado unos poco afortunados tuits relacionados con el topless de Kate Middleton en 2012, en los que él puso el foco en la duquesa de Cambridge como responsable de la situación.

"Kate Middleton es genial, pero no debería tomar el sol desnuda. Es ella quien tiene la culpa. ¿Quién no haría fotos a Kate para ganar mucho dinero y si se desnuda? ¡Vamos, Kate", decía Trump en Twitter sobre estas polémicas fotografías que publicó 'Closer' y por las que la publicación fue condenada a pagar casi 100.000 euros por daños y perjuicios.

Ahora también se han recuperado unas desafortunadas declaraciones de Donald Trump sobre Diana de Gales realizadas poco después de que ella falleciera en un accidente de tráfico. Nos tenemos que remontar a 1997, unos meses después de esta tragedia que sigue copando titulares en todo el mundo cuando han pasado dos décadas.

El presentador Howard Stern le preguntó si se hubiera acostado con ella, a lo que él respondió: "Claro que sí. Ella era muy bella. Encuentro que era tan guapa como una modelo". Y asimismo manifestó que si en lugar de haber estado saliendo con Dodi Al Fayed hubiera estado con él, posiblemente estaría viva: "Yo conocía muy bien ese túnel, que tenía un límite de velocidad de treinta millas a la hora.

Selina Scott, amiga de la familia real, ha manifestado que Donald Trump habría querido seducir a Diana de Gales, que se habría sentido incluso muy agobiada: "Bombardeaba a Diana con enormes ramos de flores. Estaba cada vez más inquieta y se parecía cada vez más a un acoso".

Donald Trump, que manifestó que se habría acostado con Diana (siempre que se hubiera sometido a las pruebas diagnósticas del VIH, virus causante del sida), también escribió en su libro 'The Art of Comeback': "Solo me lamento de una cosa, no haber tenido la oportunidad de cortejar a Diana de Gales".

Por las desafortunadas afirmaciones de Donald Trump, la prensa británica ha puesto en el punto de mira al que fuera su marido, el príncipe Carlos, porque ha invitado al mandatario a tomar el té en Clarence House. Así, en 'The Guardian' titulan: "¿Con qué calidez puede saludar Carlos a Donald Trump, el hombre que se rio de Kate y Diana?". Y lo acompañan con un demoledor subtítulo: "La reina ha recibido a tiranos antes, pero el príncipe no tenía necesidad de invitar a Trump".

La autora del artículo, la prestigiosa periodista Catherine Bennett, se emplea a fondo contra el presidente estadounidense: "En su historial de visitas de Estado, esta es probablemente la primera vez que la reina se encuentra entreteniendo a un jefe de Estado quien no solo es odioso, mendaz, sin principios, vano, racista, sexualmente depredador, misógino, malvado (...) También ha mostrado un interés espeluznante sobre dos mujeres de su propia familia".