Isabel II, visitada de nuevo por un intruso en palacio: las dos veces que falló la seguridad

Una vez más y contra todo pronóstico, una persona ajena al personal del palacio de Buckingham y a la familia real ha sido capaz de sortear todas las medidas de seguridad y colarse en la residencia de la reina Isabel II para llegar a escasos metros de su dormitorio.

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Decimos una vez más, porque un episodio similar ya ocurrió en 1982, cuando un hombre llamado Michael Fagan irrumpió en palacio, no una sino dos veces, y una de ellas llegó a sentarse a los pies de la cama de la madre de Carlos de Inglaterra. El intruso aseguró en el momento de su detención que llegó a conversar con la reina y que esta le preguntó que qué estaba haciendo allí.

Se cree que Fagan escaló muros de alambre de púas de 14 pies de altura, luego subió un tubo de drenaje hasta llegar al techo y finalmente entró al palacio a través de una ventana abierta antes de encontrar el camino que le llevó directamente al dormitorio de Su Majestad. "No sé por qué lo hice, algo se me metió en la cabeza", admitió más tarde.

Tras este episodio que resultó traumático para la reina, parecía impensable que una situación parecida se pudiera volver a repetir, sobre todo con la cantidad de medidas de seguridad que se revisaron y se reforzaron tras el incidente, pero lo cierto es que ha ocurrido, este mismo miércoles 10 de julio.

Eran las 2 de la madrugada cuando un joven de 22 años saltó la valla que hay junto a la entrada, atravesó varias puertas y llegó a situarse a escasos metros de la puerta del dormitorio de la reina. Nadie hoy se explica cómo este joven pudo pasear durante 4 minutos por Buckingham Palace con total libertad, y todo Reino Unido tiene puesta ahora la mirada en el equipo de seguridad y guardaespaldas de la reina, cuya eficacia y profesionalidad están siendo muy cuestionadas y criticadas.

¿Cuáles eran las intenciones de este chico? ¿Qué habría pasado si llega a colarse en el dormitorio de la reina? Eso nunca lo sabremos. Solo podemos esperar a que confiese sus verdaderas intenciones ante la policía que le detuvo por allanamiento de morada y que explique con sinceridad qué fue lo que le llevó tomar la arriesgada decisión de irrumpir en uno de los espacios más inaccesibles del mundo.