Pippa no es una damisela en apuros: boxea en el gimnasio más duro de Londres

La mediática hermana de la duquesa de Cambridge y cuñada del príncipe Guillermo, Pippa Middelton, ha vuelto a sorprender a la sociedad británica en su estreno como bloguera para el diario británico The Telegraph. Lo ha hechoal desvelar su pasión por los deportes rudos, más propios de otros ambientes. Pippa ha confesado su adición al boxeo, un deporte que se antoja muy alejado de los cánones deportivos que se espera practique alguien tan próxima a la familia real inglesa. Este deporte se ha asociado a clases más desfavorecidas y ajeno a los ambientes más posh (pijos) en que ella se mueve, pero que, sin embargo, ha cautivado a la hermana de la futura princesa.

Según escribe la propia Pippa, llevaba tiempo intentando fortalecer y tonificar sus músculos para soportar mejor sus sesiones de esquí, cuando un amigo cercano, del que no ha desvelado su nombre, la animó a probar y practicar boxeo. Pese a todas sus reticencias iniciales, parece que terminó decidiéndose, animada por el escultural cuerpo que exhibió la actriz Hilary Swank, en la película Million Dollar Baby. "Un físico increíble, bien tonificado y afinado, acabó de convencerme", comenta. Y al principio desentonaba por sus atuendos ajustados, colores chillones y modelitos más pijos, que chocaban con las prendas mucho más holgadas, descuidadas y amplias del resto de compañeros de gimnasio.

El club en el que entrena, el mismo en el que el actor Daniel Day Lewispreparósu papel en la película The Boxer,no es el típico gimnasio de clase alta y cuotas elevadas. Ella lo describe como un antiguo refugio antiaéreo, con escasa ventilación, pequeño, de techos bajos, lo que hace más profundos los olores a sudor y adrenalina del resto de boxeadores.Pero, eso sí, muy bien equipado. The FitzroyLodge Amateur Boxing Clubes un gimnasio sin ánimo de lucro donde se pretende ofrecer un entorno seguro para muchos jóvenes hijos de familias rotas, con problemas y en la calle. Un lugar para aprender, concentrarse y canalizar la violencia de quienes juegan y se mueven en la calle, pero donde todo el mundo tiene cabida.

Pippa está siguiendo un riguroso plan de entrenamiento, exactamente como cualquier otro en el gimnasio. Salta a lacombapara ganar agilidad, coordinación y equilibrio; golpea pesados sacos en los que descarga el stress diario. Hace sombra, esquiva y esgrima; practica todo tipo de golpes, directos, ganchos, jabs, hooks. No hay lugar para posturitas como en pilates, aquí la intensidad es continua durante una agónica hora y media, cuenta en su blog. Con el boxeo, consume hasta 600 calorías a la hora, una cantidad muy importante, un auténtico quema grasas.