Tom y Katie, un año de amor y negocio

El actor estadounidense Tom Cruise, ex novio de Penélope Cruz, y la actriz Katie Holmes celebran estos días el primer aniversario de su espectacular boda italiana. Mientras, varios medios han destapado los detalles sobre las cláusulas matrimoniales de la controvertida pareja. Y es que, en caso de divorcio, la artista no se quedará en la calle.

Katie Holmes y Tom Cruise se conocieron a principios de 2005 durante el rodaje de la película Misión Imposible III y pese a la diferencia de edad, sólo dos meses después de su primer encuentro la pareja se comprometió en matrimonio. La boda se celebró, tras muchos problemas, el día 18 de noviembre del pasado año en el interior del castillo Odescalchi, en la localidad romana de Bracciano, y se ofició según el rito de la Iglesia de la Cienciología, a la que ambos pertenecen.

La actriz Katie Holmes fue la primera en llegar al lugar, acompañada de la hija de la pareja, Suri, nacida el 18 de abril. Poco después de la entrada del novio, los 250 invitados, la mayoría de ellos famosos cantantes y actores de Hollywood, pudieron acceder al castillo, decorado para la ocasión con cientos de estandartes, flores blancas y antorchas. Estas últimas fueron las encargadas de anunciar al mundo que la pareja se había convertido ya en matrimonio. Fuertes medidas de seguridad y cinco controles de policía protegieron el evento de curiosos y periodistas, que sólo pudieron ver la llegada de los invitados en sus lujosos coches.

Desde entonces, el matrimonio se ha mostrado muy unido y son famosas las muestras de amor que ambos se prodigan en los actos a los que asisten. Sin embargo, y según revelaron algunos medios, el matrimonio ha sido un buen negocio para la mujer de Tom Cruise. Katie habría obligado al actor a firmar un contrato de 100 páginas donde se detallan las cláusulas del matrimonio y se estipula un sistema de bonificaciones progresivas por cada año de casados. Según este acuerdo, si la pareja se divorciara hoy, ella se embolsaría la nada despreciable cantidad de 44 millones de euros. No es de extrañar que esté tan contenta.