Sacha Thyssen va al colegio y sus 'tías' las mellizas no

Sacha Thyssen ya va al parvulario. Borja y Blanca han coincidido en gustos a la hora de elegir el primer centro escolar con los duques de Palma. Los cinco nietos reales fueron alumnos de la guardería Carles Rivas y de ahí -salvo Irene- pasaron al Liceo francés. 

Los padres de Sacha, que cumplió dos años el pasado febrero, quieren dar a su hijo una educación normal donde el pequeño se relacione con niños de su edad y no desarrollarse en un mundo aislado por muy privilegiado que éste sea como le ocurre a sus 'tías', Carmen y Sabina.

Las hijas mellizas de la baronesa no suelen salir de Mas Mañanas, la imponente villa en San Feliu de Guixol donde un ejercito de niñeras (con jefa que marca las pautas) y guardaespaldas las vigilan y cuidan mientras mamá Tita trabaja o viaja por medio mundo.

A diferencia de su 'sobrino' Sacha, la relación de éstas con el mundo exterior es nula. Las niñas de cuatro años juegan solas o con los perros, que son la única compañía ajena al entorno de la fortaleza de la Costa Brava. Según contaba Carmen Cervera a Vanitatis, “por ahora prefiero que mis hijas estén en casa. Tienen una profesora con la que juegan, pintan, hacen manualidades…”.

Una decisión muy diferente a la que han elegido Borja y Blanca para su primogénito. El matrimonio, que espera su segundo hijo para mediados de agosto, prefiere una educación más abierta para que el pequeño se socialice lo antes posible. Y está demostrado que cuando los niños dejan de ser bebés, la guardería y el parque son los mejores lugares para que los príncipes de la casa se percaten de que deben aprender a compartir con otros principes como ellos.

Seguramente Borja recuerda sus años de adolescencia en Lugano con poca compañía de su edad. En Villa Favorita vivía con la abuela, un regimiento de servicio y los profesores particulares que todos los días acudían a darle clase. Ahora ha elegido otro tipo de educación para su primer hijo.

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