Alberto Alcocer festeja a sus amigos Juan Abelló y Ana Gamazo en su finca de Cádiz

Un agradable final del estío. El famoso financiero Alberto Alcocer ha organizado, en estos últimos días de verano, una fiesta con un grupo reducido de amigos en su espectacular finca de caza y de producción de carne de vacas retintas, situada muy cerca del parque natural de Los Alcornocales, en la provincia de Cádiz. Se trató de una cena sin DJ y sin flamenco, algo tan habitual en este tipo de reuniones festivas y más aún si se producen en verano.

Alcocer, íntimo del rey don Juan Carlos, con el que sigue compartiendo veladas, almuerzos y escapadas a cualquiera de las fincas que posee en los montes de Toledo, aprovechó que muchas de sus amistades pasan el verano en sus mansiones de Marbella y Sotogrande para reunirlos en El Corzo, su campo andaluz junto con La Nateruela. La velada contó con la presencia del empresarioJuan Abelló y su mujer, Ana Gamazo; del presidente de Bankinter, Pedro Guerrero; los Mora Figueroa y varios empresarios como Leopoldo Rodes y Francisco Gandía. Este último continuaría días después sus vacaciones con un viaje a China. El resto de invitados volvieron esa misma noche a sus palacios de verano.

La cena tampoco fue excesiva, sino discreta y preparada por el servicio de la finca con platos como el jamón, gazpacho y solomillo acompañado de productos de la huerta y ensaladas. Alberto Alcocer, que fue presidente de Puerto de Sotogrande, veranea en esta urbanización desde hace años, y ahí es donde su vida es más social.

La finca que acogió la cena se encuentra muy bien comunicada, y en algo menos de una hora se llega a Sotogrande, primero por la A-381 y, sesenta minutos después, a Marbella. A diferencia de la temporada de caza, ningún invitado durmió en la vivienda familiar salvo los anfitriones: Alberto Alcocer, su mujer, Margarita Hernández, y las dos niñas del matrimonio, Carlota y Margarita, que nacieron en 2001 y lo convirtieron en padre por quinta vez. Con Koplowitz tuvo tres hijas Esther, Alicia y Carmen.

Un perfil discreto

A diferencia de su primo, Alberto Cortina, que es más proclive a las reuniones sociales públicas, a las que acude acompañado de su mujer, Elena Cue, mujer bella y muy comprometida con las acciones del padre Ángel, Alberto Alcocer es todo lo contrario. Procura mantener un perfil muy bajo en todo aquello que no tenga que ver con su faceta empresarial. Incluso en este último aspecto, no es fácil ver su imagen en reportajes relacionados con el mundo económico o financiero. El exmarido de Esther Koplowitz se casó con Margarita Hernández en 1994. Ella tampoco forma parte de las denominadas mujeres ‘socialité’ como Isabel Preysler o Carmen Martínez Bordiú, protagonistas de reportajes posados y photocalls de todo tipo.

Hace años, Alberto Alcocer tuvo problemas legales con una de las fincas y acabó pleiteando contra el duque de Lerma, Fernando Larios y Fernández de Córdoba, al que compró La Nateruela y La Reservilla, por no entregarle la escritura ante notario de estos dos campos.